Un grupo de ONG de Venezuela y Colombia hicieron un llamado público el miércoles a la ONU para que designe un enviado especial para atender la crisis que se vive en la zona fronteriza, con combates en suelo venezolano y cientos de personas escapando hacia el país vecino.
El desplazamiento de unas 4.000 personas comenzó el 21 de marzo después que militares venezolanos lanzaron una ofensiva contra grupos armados ilegales de Colombia en La Victoria, ubicado en el estado Apure, frente a la ciudad colombiana de Arauquita, donde llegaron en busca de refugio.
Algunos venezolanos que huyeron hacia Arauquita acusaron a los militares de abusos y atropellos, incluida la muerte de civiles y el robo de pertenencias, lo que fue negado por el ministro de la Defensa, Vladimir Padrino.
Las autoridades venezolanas informaron que dos militares murieron en los enfrentamientos y que los rebeldes usaron minas antipersonas, mientras grupos locales de derechos humanos han denunciado que al menos cuatro civiles fueron asesinados por un grupo especial policial enviado a la zona.
Colombia y Venezuela “no pueden tomar los sucesos de Apure y Arauca ocurridos esta semana como excusa para un escalamiento de tensiones”, sostiene el comunicado firmado por 300 colombianos y venezolanos, incluidas 60 ONG de ambos países.
“Consideramos urgente que el secretario general de las Naciones Unidas designe un enviado especial para la crisis fronteriza”, agregó el pronunciamiento divulgado en la página web de Control Ciudadano, un observatorio no gubernamental venezolano que trata temas de seguridad y defensa nacional.
Entre los que firmaron el comunicado figura Humberto De La Calle, quien fue el jefe de la delegación oficial que negoció un acuerdo de paz firmado en 2016 con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
El Ministerio de Información de Venezuela no respondió de inmediato un pedido de comentario.
El gobierno del presidente Iván Duque de Colombia ha reiterado que disidentes de las FARC y del rebelde Ejército de Liberación Nacional (ELN) operan en territorio de Venezuela y cuentan con el apoyo del Estado venezolano, lo que ha sido negado por el mandatario Nicolás Maduro. Reuters