Obama, tras muerte de Wright: Hay que reinventar las prácticas policiales

Obama, tras muerte de Wright: Hay que reinventar las prácticas policiales

En la imagen, el expresidente estadounidense Barack Obama (2009-2017). EFE/Jim Lo Scalzo/Archivo

 

El expresidente estadounidense Barack Obama (2009-2017) aseguró este martes que EE.UU. debe “reinventar” sus prácticas policiales, después de que el joven afroamericano Daunte Wright muriera de un disparo durante un control policial este fin de semana en Brooklyn Center (Minesota).

Obama consideró en un comunicado que el hecho de que esta muerte haya sucedido cuando Mineápolis está albergando el juicio de Derek Chauvin, un policía blanco acusado de matar a otro afroamericano, George Floyd, indica “no solo lo importante que es llevar a cabo una investigación completa y transparente, sino también cuán grave” se necesita “reinventar las prácticas policiales y la seguridad pública en este país”.

“Michelle y yo lloramos junto a la familia Wright por su pérdida. Nos identificamos con el dolor que sienten las madres, los padres y los niños negros después de otra tragedia sin sentido”, agregó el exmandatario.

El domingo, durante un control de tráfico en Brooklyn Center, una agente blanca disparó de forma supuestamente “accidental” a Wright, de 20 años, según la versión de la Policía local.

Según el departamento policial, la agente de policía quería usar una pistola eléctrica conocida como táser para inmovilizar a Wright, pero se confundió y disparó con su arma de fuego contra el joven afroamericano.

Sobre el motivo de la parada de tráfico, explicó que el vehículo fue interceptado porque no tenía algunos papeles en regla, tras lo que pidieron la identificación a Wright y entonces se dieron cuenta de que tenía una orden de arresto pendiente por no haber comparecido ante la Justicia por los delitos de posesión ilegal de un arma y resistencia a la autoridad.

Entonces, al tratar de detenerle, él se resistió, intentó entrar de nuevo en su vehículo y la policía le disparó.

El incidente sucedió cuando los nervios están a flor de piel en Mineápolis, que espera con ansiedad el resultado del juicio contra Chauvin, uno de los cuatro policías acusados del asesinato de Floyd el año pasado, que desató una ola de protestas raciales en todo el país. EFE

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