La Organización Demócrata Cristiana de América (ODCA) expresa su preocupación por la nueva arremetida del régimen autoritario de Venezuela contra los medios de comunicación independientes y la disminución de la libertad de expresión y los espacios de libertad de los venezolanos.
Por CCN
El pasado viernes 14 de abril, el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), controlado por el régimen de Maduro, impuso al diario El Nacional una multa de más de 13 millones de dólares. Esta suma debe pagarse a Diosdado Cabello, como castigo por reproducir un reportaje publicado por medios españoles y que lo vinculan al negocio del narcotráfico.
La medida decretada por el TSJ constituye un atentado a la libertad de expresión y de prensa y, en la práctica, busca apoderarse de los medios de comunicación independientes, imponer la censura y ahogar la voz de los venezolanos que manifiestan posiciones disidentes o contrarias a los usurpadores.
El Tribunal Supremo de Justicia se ha convertido en el arma de los usurpadores para criminalizar a la oposición política y consolidar un régimen totalitario.
La libertad de prensa y la libertad de expresión no pueden ser vulneradas por los intereses políticos de unos pocos y constituyen derechos humanos básicos universales, que están protegidos por convenciones internacionales, y representan condiciones imprescindibles para la existencia de la democracia.
Los venezolanos tienen el derecho fundamental de expresar su oposición al régimen y sus políticas a través de una prensa libre e independiente.
Esta sentencia contra el diario El Nacional y otras acciones judiciales en curso contra el diario Tal Cual y el sitio La Patilla son una clara demostración del temor del régimen autoritario a la libertad de expresión y la libertad de prensa.
En consecuencia, alzamos nuestra voz por Venezuela y su futuro como una nación libre, democrática y con derechos inquebrantables para todos.
La Organización Demócrata Cristiana de América promoverá la intervención de todos los mecanismos internacionales para denunciar estos abusos y defender la democracia, los derechos y libertades de los venezolanos, y muy especialmente la libertad de expresión y de prensa en Venezuela.