Durante su discurso con motivo del 76 aniversario de la victoria de la Unión Soviética sobre la Alemania nazi, el presidente Vladímir Putin advirtió este domingo 9 de mayo que Rusia “defenderá sus intereses geopolíticos y su seguridad con firmeza”, y fustigó a quienes intentan reavivar la ideología nazi y la “rusofobia”, además criticar a aquellos que de nuevo gestan “planes agresivos”.
Por DW
“Rusia defiende incesantemente el derecho internacional. Al mismo tiempo, defenderemos firmemente nuestros intereses nacionales y garantizaremos la seguridad de nuestro pueblo”, dijo Putin ante cientos de militares en uniformes de gala reunidos en la Plaza Roja. También aseguró que las ideas nacidas del nazismo “son puestas al día” y que existe un retorno de “discursos racistas, de superioridad nacional, de antisemitismo y de rusofobia”.
La Segunda Guerra Mundial “trajo pruebas, dolor y lágrimas insoportables que son imposibles de olvidar, y no hay perdón ni justificación para aquellos que de nuevo gestan planes agresivos”, señaló el mandatario, cuyas advertencias se conocen cuando las relaciones con Estados Unidos y gran parte de Europa pasan por su momento más bajo en años.
“Siempre estaremos orgullosos”
Acompañado únicamente de un líder extranjero, el presidente de Tayikistán, Emomali Rajmon, Putin sostuvo que solo décadas “nos separan de aquellos tiempos en los que se estaba formando en el centro de Europa la plaga nazi”. El líder ruso agregó que es necesario sacar lecciones de la historia, y lamentó que “los que estaban obsesionados con la delirante teoría de la superioridad están nuevamente tratando de ponerla en práctica”, agregando que eso refiere “no solo a todo tipo de radicales y grupos terroristas internacionales”.
El mandatario dijo que hoy hay “intentos de reescribir la historia”, al tiempo que recordó que fue “el pueblo soviético el que logró la hazaña” de derrotar a la Alemania nazi. “Cada familia guarda la sagrada memoria de aquellos que defendieron la victoria. Y siempre estaremos orgullosos de su hazaña”, señaló. Una garantía para ello, dijo, son las Fuerzas Armadas de Rusia, “herederas de los soldados de la victoria”.
Más de 12.000 hombres, 190 vehículos, 76 helicópteros y aviones y sistemas de armamento comenzaron a desfilar después del discurso ante el jefe de Estado y un público de oficiales y veteranos. Las celebraciones del 9 de mayo son un momento de comunión patriótica dedicado a los cerca de 20 millones de soviéticos muertos durante el conflicto.