Miembros de la familia de George Floyd y otros que han perdido a seres queridos en encuentros con la policía se unieron el domingo a activistas y ciudadanos en Minneapolis en una marcha que forma parte de una serie de eventos a nivel nacional para conmemorar el primer aniversario de su muerte.
Cientos de personas se reunieron frente a la corte del centro de Minneapolis donde hace un mes concluyó el juicio en contra del expolicía Derek Chauvin. Muchos de los asistentes portaban pancartas con la imagen de Floyd, de Philando Castile y de otros hombres de raza negra que han muerto a manos de la policía.
En medio de consignas de “¡Sin justicia, no hay paz!” y “Digan su nombre”, el gobernador Tim Waltz, y los alcaldes de Minneapolis, Jacob Fray, y de St. Paul, Melvin Carter, observaron junto a una docena de familiares de Floyd mientras los oradores exigían justicia para las familias de los hombres de raza negra muertos por policías.
“Ha sido un año muy largo. Ha sido un año doloroso”, dijo la hermana de Floyd, Bridgett, a la multitud. “Ha sido muy frustrante para mí y mi familia el hecho de que nuestras vidas hayan cambiado en un parpadeo. Aún no sé por qué.”
Desde Washington Sofía Pisani para La Voz de América y LaPatilla.com
