La esquina de la calle del sur de Mineápolis (Minesota) en la que hoy hace un año murió asfixiado el afroamericano George Floyd fue escenario este martes de un tiroteo que se saldó con un herido, confirmó a Efe el Departamento de Policía de esa ciudad.
Por: Diario NY
Un portavoz de la Policía de Mineápolis explicó que se registraron unos 10 disparos cerca de la plaza conocida ahora como “Plaza George Floyd”, justo en la esquina de la calle 38 y la Avenida Chicago, donde Floyd fue asesinado por el entonces agente Derek Chauvin.
En un comunicado, la Policía dijo que a las 10.10 hora local varios agentes llegaron al lugar de los hechos, después de recibir llamadas de alerta sobre los disparos.
Según los testigos recogidos por los agentes, varias personas vieron a un vehículo sospechoso saliendo del área “a alta velocidad”.
Trasladan a una persona al hospital luego del tiroteo
Poco después, una persona fue trasladada a un hospital local con una herida de bala y posteriormente fue ingresada en el Centro Médico del Condado de Hennepin para recibir tratamiento.
“Se cree que la lesión no pone en peligro su vida”, señaló la Policía.
Acceso restringido y poca presencia policial en “George Floyd Square”
La conocida como “Plaza George Floyd” tiene el acceso restringido y controlado por activistas y raramente hay presencia policial desde la muerte del afroamericano.
De acuerdo con videos del momento, varias decenas de personas estaban en la plaza ofreciendo sus respetos y rezando por Floyd en el aniversario de su muerte el pasado 25 de mayo de 2020.
La muerte de Floyd desencadenó entonces la mayor ola de protestas y disturbios raciales en EE.UU. desde finales de la década de 1960 tras el asesinato de Martin Luther King con una única súplica: el fin de la brutalidad policial contra las minorías raciales.
Chauvin, que presionó con su rodilla el cuello de Floyd durante más de 9 minutos, fue hallado culpable en abril pasado de los tres cargos que enfrentaba: asesinato involuntario en segundo grado, asesinato en tercer grado y homicidio involuntario en segundo grado.
Como no tiene antecedentes penales, solo podría ser condenado a un máximo de 12 años y medio de prisión por cada uno de los primeros dos cargos y a 4 años de cárcel por el tercero. La lectura de su sentencia tendrá lugar el 25 de junio.