Las organizaciones criminales y guerrilleras que controlan vasta cantidad de territorio en los estados fronterizos venezolanos están en vías de extender sus operaciones a la vecina Colombia, en lo que amenaza con recrudecer la violencia en el vecino país, concluye un informe elaborado por el centro de investigaciones The Risk Awarenes Council.
ANTONIO DELGADO // EL NUEVO HERALD
El fenómeno se produce en momentos en que éstas redes ilícitas, asociadas con elementos corruptos de las fuerzas armadas venezolanas, utilizan el control que ejercen sobre el territorio nacional para facilitar la exportación de drogas y el contrabando de oro, coltán y otro minerales, resalta el estudio.
Es un proceso que gradualmente ha disuelto la autoridad del Estado sobre vasta cantidad de territorio venezolano y que ahora amenaza con extenderse hasta Colombia, dijeron los autores del estudio.
“En la frontera colombo venezolana emerge el riesgo de un conflicto de nueva generación, que no necesariamente enfrentaría formalmente ambas naciones, pero sí, a fuerzas regulares e irregulares que comparten o defienden sus soberanías o territorios”, advierte el informe.
RIESGO DE VIOLENCIA
Por el momento, el fenómeno de la violencia se ha estado manifestando principalmente en el estado venezolano de Apure, donde enfrentamientos armados por el control de las rutas de droga dejaron un saldo de decenas de muertos, cientos de heridos y más de 6,000 desplazados.
Pero la dinámica registrada hasta ahora apunta a extender la “zona gris” bajo control de las organizaciones criminales hacia el territorio colombiano en la medida en que las redes ilícitas comiencen a ampliar sus nexos con los proveedores de droga en el vecino país
“Estas actividades que se están desarrollando están orientadas a acentuar la fragmentación del Estado y la disolución de la frontera para fundir un espacio territorial que conecte a Colombia con Venezuela”, explicó el consultor en Seguridad y Riesgos Emergentes, Alberto Ray, quien es uno de los coautores del estudio.
Ese proceso de expansión busca establecer un asidero de pie dentro del territorio colombiano para luego expandirse a otras regiones del vecino país, a fin de acceder con mayor facilidad y seguridad las rutas conocidas del narcotráfico, agregó.
“El objetivo es conectar a Venezuela de una manera segura a Venezuela con la Costa del Pacífico en Colombia, que es donde más se cultiva coca, además de crear un corredor hacia Ecuador, que crearía una puerta de entrada para una ruta al resto de Sudamérica”, sostuvo Ray.
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