Chile registró este miércoles una tasa de positividad del 0,83 % sobre el total de pruebas realizadas, la cifra más baja de toda la pandemia, y el país está a la espera de que las autoridades anuncien en los próximos días qué va a ocurrir con las fronteras, cerradas para turistas desde abril.
Las autoridades sanitarias informaron que el total de infectados a la fecha asciende a 1,64 millones de personas desde marzo de 2020 y que la cantidad de pacientes activos, es decir, con capacidad de diseminar el virus, es de 3.568 a nivel nacional.
Durante las últimas semanas el país ha recuperado parcialmente la normalidad y disfruta de más libertades que nunca desde la llegada del virus, luego de tres meses de una grave segunda ola que tuvo la red sanitaria al borde del colapso entre marzo y junio.
Según señaló el ministro de Salud, Enrique Paris, en esta jornada se reportaron 375 nuevos casos en todo el territorio y la cantidad de fallecidos fue de ocho personas.
En total, los decesos alcanzan los 36.945 y, considerando los casos sospechosos según el Departamento de Estadísticos e Informaciones del Ministerio de Salud, ascienden sobre los 45.000.
A la fecha, más de 13 millones de personas han completado su esquema de vacunación (más del 85 % de la población susceptible a vacunarse), lo que sitúa al país suramericano como uno de los más rápidos del mundo en inmunizar a sus habitantes.
Además, se han administrado más de un millón de terceras dosis de AstraZeneca a los mayores de 55 años que completaron su vacunación con Coronavac, la solución mayoritaria en el país.
Todos los barrios del país han abandonado la cuarentena total y el toque de queda se ha retrasado dos horas en todo el territorio, comenzando a las 00.00 horas y hasta las 05.00 horas.
Sin embargo, las autoridades mantienen todavía las fronteras cerradas para turistas desde abril pasado y el estado de excepción por catástrofe hasta octubre, un régimen que posibilita imponer toques de queda y cuarentenas.
EFE.