A mediados de los años sesenta, Adam West se convirtió en el primer actor en dar vida al enmascarado Batman y su alter ego, el filántropo millonario Bruce Wayne, en la pantalla chica. Una versión que se ganó el amor de los fanáticos del cómic de D.C., pero que ocultó al público el lado más feroz de su protagonista: su vida sexual.
Por Infobae
Antes de Batman, la serie, ya habían existido otras adaptaciones del famoso personaje a la televisión: en los años 40, Columbia Pictures estrenó un serial cinematográfico protagonizado por Lewis Wilson que, incluso, sirvió como motivación para el estreno del programa protagonizado por West.
Existen distintas versiones de la idea que dio origen a la serie de los años 60. Una es que durante un relanzamiento del serial de los años 40 a finales del año1964, el público expresó un buen recibimiento que motivó a los ejecutivos de la red televisiva ABC a lanzar una serie.
Otra versión apunta que durante una emisión del serial que tuvo lugar en una reunión de Hugh Hefner en Chicago, empresarios y conejitas Playboy respondieron con carcajadas al programa. Reacción que despertó la curiosidad de un ejecutivo de la cadena que decidió proponer el lanzamiento de una nueva adaptación del superhéroe a la pantalla.
Sea cual sea la razón, en 1965 la cadena estadounidense decidió echar a andar un programa cómico que adaptara las aventuras de un superhéroe a la televisión y escogieron al murciélago por ser uno de los favoritos del público. Así podrían replicar el éxito que habían tenido programas previos, como El llanero solitario.
El programa tendría como protagonistas a Batman y a su mano derecha y camarada, Robin. La premisa era simple: durante los episodios, los enmascarados se enfrentarían a algunos de sus enemigos más reconocibles, como Acertijo o el Guasón, y salvarían a Ciudad Gótica de las garras del mal.
Sin embargo, encontrar a un actor que pudiera mantenerse ecuánime ante las líneas cómicas que decía el personaje sería el reto principal. Era necesario dar con un actor que pudiera personificar el carácter de Bruce y, al mismo tiempo, entrar en el tono cómico de la serie.
Ahí fue donde Adam West entró en juego. Durante ese año, el actor originario de Washington, en Estados Unidos, interpretaba en la televisión a Capitán Q, la imagen de la marca de chocolate en polvo Quick -posteriormente Nesquick- perteneciente a Nestlé.
Su carrera estaba a punto de despegar y realizó la audición para convertirse en Batman. Asimismo, según relató él mismo, durante ese mismo año rechazó la oportunidad de reemplazar a Sean Connery en su papel como James Bond para dar vida al superhéroe.
El resto del elenco estuvo compuesto por el actor Burt Ward, como Robin, Alan Napier en el papel de Alfred, Niel Hamilton como James Gordon, Christian Moretti, Madge Blake, Julie Newman, Eartha Kitt, Frank Gorshin, César Romero en el papel de el Guasón, Burgess Meredith e Yvonne Craig.
Y así, comenzó uno de los fenómenos más grandes de la televisión en aquella década. En el foro de grabación, sin embargo, la interacción entre los actores de la serie era muy distinta: orgías y “rapiditos” entre las escenas. Todo aquello fue parte de la historia casi no contada de la serie que pronto se convirtió en un éxito.
Tras bambalinas: el calor de los superhéroes
“Eran los sesenta de los swingers y el amor libre. Las mujeres se nos lanzaban”, explicó alguna vez West, quien logró sacar el mayor provecho de la sensación que ocasionaba con el traje de superhéroe en tonos gises y negros apretado que utilizó en escena.
De acuerdo con el diario británico Daily Mail, West y Burt Ward solían tener relaciones sexuales de manera exprés con distintas mujeres durante las grabaciones de las escenas de la serie.
Incluso, ambos solían dejarse los trajes de sus personajes porque era especialmente difícil quitárselos: “Por las limitaciones del disfraz, tienes que tener ‘rapiditos’”, contó años después del final del programa al mismo diario.
Fuera del set, la vida sexual de este ícono de los sesenta fue igual de salvaje, pues participaba constantemente en orgías. Según el mismo medio, durante una de ellas el actor y el intérprete que dio vida a Acertijo en la serie, Frank Gorshin, fueron expulsados.
Ello luego de que ambos comenzaron a actuar como sus respectivos personajes durante la orgía: “Llegamos y era una orgía”, explicó West. “Así que inmediatamente entré en el papel de Batman y Frank en el de Acertijo, porque causamos una gran carcajada a los que estaban ahí”.
“Fue tan divertido para nosotros, lo que nos encontramos. Y nos echaron. Nos expulsaron de una orgía”, recordó West durante una entrevista con Daily Mail, quien al momento de tomar su papel en la serie ya había tenido dos divorcios y se convirtió en el galán de las hermanas Natalie y Lana Wood.
No obstante, al terminar la serie en 1968, West contrajo matrimonio por tercera y última vez con Marcelle Tagand en 1970. El actor sufrió de una fuerte depresión cuando el programa terminó, pues no pudo obtener otro rol importante debido a la sombra que proyectó el murciélago en su carrera.
Finalmente, su vida personal se convirtió más doméstica conforme los años pasaron: “Nuestro papá siempre se vio a sí mismo como el ‘Bright Night’ que inspiró a sus fanáticos a tener un impacto positivo en sus vidas. Siempre será nuestro héroe”, dijo su familia en un comunicado de acuerdo con The Hollywood Reporter.
Después de una breve batalla contra la leucemia, Adam falleció el nueve de junio de 2017 en Los Ángeles, California a los 88 años de edad. Sin embargo, siempre será recordado por el personaje que regaló a la televisión.