El arquitecto mexicano Jorge Arias ha entrado en el libro Guinness de los récords al convertirse en el coleccionista más grande del mundo de artículos del filme “Cars” con más de 1.200, según confirma la organización.
“Me cautivó la película ‘Cars’, la viveza de los autos, sus expresiones. En el 2006 le compré a mi hija Natalia uno de los carros (coches) y ahí empezó todo”, señala este miércoles Arias a Efe.
El hombre de 45 años desarrolló su pasión por los personajes de “Cars” sin un objetivo; un día compró al Rayo McQueen, protagonista del filme, después otros y así fue poco a poco hasta llegar a unos 1.500.
Aunque el libro Guinness de los récords le hizo el reconocimiento al llegar a 1.200.
“Fui a una plaza, tenían al Rayo McQueen de diferentes maneras, con dientes, con manchas de aceite. Un comerciante que viajaba a Estados Unidos los traía y así fui poco a poco. Solo del Rayo tengo más de 50 carros”, declara.
El coleccionista asumió su afición como una manera de regresar a la niñez, al hacer lo que hacen los niños, jugar con los coches, y eso le ha permitido relacionarse con los chicos que visitan con sus padres el restaurante de su familia en la alcaldía de Cuajimalpa de la Ciudad de México.
“Tenemos un negocio de comida, comencé a poner los carritos en una vitrina y a la gente le gustaba; hablo con los niños, les dedico tiempo y es una gran experiencia que sus padres agradecen”, cuenta.
El mexicano sigue aficionado a la saga de “Cars”, y ha visto sus tres filmes. Y ahora cuenta los días restantes para el año que viene, cuando el canal de Disney saque una serie de la misma historia.
McQueen, Sally, Mater y Chick Hicks aparecen de repetidas maneras en la vitrina de Arias, pero el coleccionista también posee a personajes secundarios, como una carroza fúnebre que sale pocos segundos en la tercera parte de la película.
Aunque su hija ya es adulta, Arias siguió por su cuenta la recolección de vehículos, está atento a las nuevas adquisiciones de los vendedores y abierto a comprar a los personajes en diferentes poses, lo cual ha hecho crecer la cantidad de coches.
“Antes los carritos acumulaban polvo, ahora los cuido más; personas de Monterrey, Puebla, Querétaro y otros lugares de México me han visitado para ver la colección y de países como Honduras me han mostrado interés”, concluye.
EFE