En marzo de 2020, el príncipe Harry y Meghan Markle decidieron abandonar su lugar en la familia real. La pareja se mudó a Estados Unidos y, desde entonces, comenzó una nueva vida con sus dos hijos en California. Los duques de Sussex, además, se han mantenido ocupados con el trabajo: firmaron acuerdos multimillonarios con Netflix y Spotify para producir contenidos infantiles, documentales y podcasts.
Por La Nación
Con su partida, el príncipe William y Kate Middleton han tenido que hacerse cargo de la mayoría de las responsabilidades reales. La reina Isabel se ha mantenido ocupada también, pero desde que en octubre pasó una noche en el hospital, ya nada ha sido lo mismo. Por orden médica, la soberana británica debe pasar al menos dos semanas de descanso. Con su abuela internada, se dejó correr la voz de que Harry había entrado en pánico al no poder estar cerca de ella.
Tras la internación de la reina y una posible reducción en su carga de trabajo, quedan dudas sobre quién asumirá sus deberes reales mientras se recupera. En este contexto, sus compromisos más rutinarios podrían ser atendidos por otros miembros de la realeza más jóvenes de la familia que podrían intervenir como “consejeros de Estado”: se trata de las cuatro personas mayores de edad en la línea de sucesión. Ellos son los príncipes Carlos, Andrés, William y Harry.
A pesar de que Harry dejó sus deberes reales, todavía está legalmente en la línea de sucesión. La diferencia con William y Carlos es que estos tienen diferentes roles y responsabilidades en la realeza. Por otro lado, la participación de Andrés en los asuntos de la corona ha sido suspendida indefinidamente por acusaciones de conducta sexual inapropiada y, al menos, un probable juicio pronto.
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