Es la más reciente compañía automotriz en ubicar su cadena de suministro de vehículos eléctricos en los EE. UU.
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Toyota construirá una fábrica de baterías de USD 1.29 mil millones en Carolina del Norte en un esfuerzo por llevar parte de su cadena de suministro de vehículos eléctricos a los EE. UU. La noticia llega inmediatamente después del anuncio de Toyota de que invertirá alrededor de USD 13.6 mil millones en tecnología de baterías durante la próxima década, incluida una inversión de USD 9 mil millones en producción, mientras intenta electrificar su línea de vehículos, reseña The Verge
Toyota planea distribuir los USD 1.29 mil millones para la nueva fábrica durante la próxima década, pero la producción en la instalación está programada para comenzar en 2025, dijo Chris Reynolds, director administrativo de Toyota Motor North America. En el primer año, Toyota planea producir 1,2 millones de paquetes de baterías para su próxima línea de vehículos eléctricos, dijo Reynolds.
Toyota ha anunciado que creará 1.750 nuevos puestos de trabajo
“Esta inversión, que creo que es la inversión de capital privado más grande hasta la fecha en la historia de Carolina del Norte, creará al menos 1.750 nuevos puestos de trabajo y nos ayudará a desarrollar y ubicar la producción de baterías automotrices”, dijo Reynolds durante una conferencia de prensa allanando el camino para baterías eléctricas. vehículos que se fabrican aquí en los Estados Unidos de América “.
La fábrica no llega a los contribuyentes sin costo alguno. De acuerdo a Noticias y observadores, El Comité de Inversión Económica de Carolina del Norte aprobó un paquete de incentivos fiscales de $ 438,7 millones para alentar a Toyota a construir en el estado.
La fábrica de baterías de Toyota es la última instalación nueva planificada a medida que los fabricantes de automóviles se esfuerzan por aumentar la producción de vehículos eléctricos. Se espera que el primer vehículo eléctrico de largo alcance de Toyota, el SUV compacto BZ4X, llegue al mercado a mediados de 2022.
Ford y el fabricante de baterías de Corea del Sur, SK Innovation, están gastando USD 11.4 mil millones en varias fábricas nuevas en Tennessee y Kentucky, mientras que General Motors planea cuatro nuevas plantas de baterías en los EE. UU. con su socio LG Chem. En Europa, Volkswagen apunta a tener seis plantas de producción de celdas de batería operativas para 2030. Y Tesla está a punto de completar su fábrica de baterías en Berlín, que produciría 250 GWh, aproximadamente el equivalente a la capacidad de producción global actual de celdas de batería.
Según GlobalData, una empresa de datos y análisis, la producción global de baterías aumentará de 95,3 GWh en 2020 a 410,5 GWh en 2024.
La noticia también tiene como telón de fondo un vigoroso cabildeo en Washington, DC, sobre el futuro del crédito fiscal federal para vehículos eléctricos, que actualmente ofrece USD 7.500 de descuento en el precio de compra de algunos vehículos eléctricos. Los demócratas en el Congreso propusieron agregar USD 12.500 al crédito para comprar vehículos eléctricos fabricados por trabajadores sindicalizados en los EE. UU., lo que provocó una reacción violenta de empresas no sindicalizadas como Tesla y Toyota. El fabricante de automóviles japonés ha publicado anuncios en periódicos de página completa acusando al presidente Joe Biden y a los demócratas de “jugar a la política con el medio ambiente”.
Aunque la compañía fue uno de los primeros líderes en automóviles híbridos de gas y electricidad con el Prius, Toyota consideró los híbridos como una medida provisional hasta que las celdas de combustible de hidrógeno se volvieran competitivas. Ahora, la compañía está tratando de ponerse al día con empresas como Nissan y, según los informes, ha presionado para frenar la transición de EE. UU. a los vehículos eléctricos.