Las zonas y centros comerciales de Margarita no tienen la concurrencia de otros años y ni siquiera se compara con la del año pasado cuando ya las ventas eran bajas.
Por Dexcy Guédez La Patilla
Sin embargo, para estas alturas de la temporada decembrina, los vendedores reportan una caída de las ventas en alrededor del 60% en comparación con el año pasado.
Un recorrido por los bulevares Gómez y Guevara en pleno casco comercial de Porlamar, deja en evidencia una desolación inusual cuando los empleados públicos del país ya han cobrado sus aguinaldos.
Anahis Moreno, empleada de una alcaldía de Nueva Esparta, confirmó que lo poco que recibió como pago de aguinaldos fue fraccionado a través del Sistema Patria. Incluso, dijo que todavía le deben el 25% de esa bonificación. “Ni soñar que pueda destinar algo de eso para los estrenos de diciembre. Esa miseria se fue en comida y no alcanzó ni para una semana”, afirmó.
Esa apreciación la compartió Felipe Rodríguez, un vendedor informal del bulevar Gómez, quien añoró el diciembre pasado cuando para estas fechas las ventas tenían un ritmo más aceptable. “La inflación acabó con nuestras ventas y no tenemos esperanzas que puedan repuntar, porque ya los aguinaldos se esfumaron. La gente los utiliza para comida o medicinas”, expresó.
Jennifer Salazar, encargada de una zapatería en el casco comercial de Porlamar, aseveró que las ventas están muy bajas a pesar de que abundan las ofertas en esos establecimientos. “Hemos tenido que optar por el perifoneo para atraer los posibles compradores, pero ni así logramos levantar las ventas”, dijo la empleada.
Recordó que para el año pasado ya el tradicional “cochinito” de las propinas por ventas estaba pesado y en esta oportunidad es poco lo que ha recibido por la ranura.
Coincide con los otros comerciantes en cuanto a que no se ilusiona por una mejoría impactante, pero confía en que este fin de semana haya más movimiento de compradores para que los vendedores puedan ganar buenas comisiones.