Este fuerte fue construido por Guillermo el Conquistador en 1078 en la orilla norte del río Támesis, en el centro de Londres. Además de ser un almacén de armas, contener la Casa de la Moneda, tener habitaciones lujosamente amuebladas y contener una colección de joyas de la familia real, la torre también se utilizó como cárcel y centro de tortura.
Por La Vanguardia
George Plantagenet, duque de Clarance, fue uno de los prisioneros más famosos. Si bien los registros oficiales indican que fue ejecutado en privado, en la torre, por alta traición contra su hermano Eduardo IV, las leyendas alegan que fue ahogado dentro de un barril de su vino favorito en 1478. Ana Bolena, la segunda esposa de Enrique VIII, llegó a la torre de Londres en mayo de 1536. Fue ejecutada después de ser acusada de adulterio e incesto.
Durante los siglos XVI y XVII se llegó a torturar a prisioneros para sacarles información. El elemento más utilizado era el potro. A la víctima se le ataba de pies y manos sobre una superficie que iba conectada a un torno, y luego se tiraba lentamente de las cuerdas hasta dislocar los miembros.
Yeoman Warder Pete McGowran, de 63 años, quien vive en la fortaleza desde hace 12 años, y trabaja como guardia del lugar, reveló que tuvo una experiencia paranormal. Se encontraba en la Tower Green, un espacio donde dos consortes de la reina inglesa y varios nobles británicos fueron decapitados. “Eran alrededor de las 2.30 de la mañana y estaba durmiendo en una vieja cama de metal. De repente, la parte inferior empezó a moverse. Estuvo así durante unos 20 segundos”.