Con una nueva retrogradación de Mercurio (habrá cuatro en 2022), se renueva el interés en entender de qué se trata la retrogradación de un planeta. ¿Cambia su trayectoria? ¿Va hacia atrás? Lo cierto es que cuando un planeta retrograda se da una ilusión óptica que da la sensación de que se mueve en la dirección contraria, pero es un movimiento aparente desde la mirada de la Tierra. Así lo reseñó Clarín.
La primera retrogradación de Mercurio en 2022 será desde el 14 de enero de 2022 al 3 de febrero de 2022. Las siguientes serán en mayo, septiembre y diciembre.
Dice la astróloga Patricia Kesselman: “Mercurio es el planeta asociado a la comunicación, al proceso de aprendizaje, a nuestra gestión de cómo procesamos y absorbemos la información es un planeta sumamente vincular en donde también aprendemos, echarnos a comunicarnos, a mejorarnos”.
Y agrega: “También el planeta Mercurio tiene que ver con la tecnología, con las redes wifi y las retrogradaciones son conocidas justamente por fallas y caídas en los sistemas y en las redes, muchas veces causando algunas incomodidades”.
La retrogradación de un planeta, una “ilusión óptica”
En el libro Astrología. Historias y claves de un lenguaje fascinante (Paidós), la astróloga Lucía Ángeles Ferreccio y la periodista y directora de Un día en Venus Leticia Pogoriles explican más sobre la retrogradación de los planetas desde la astrología y de qué se trata este movimiento aparente, como una ilusión óptica:
“Los planetas pueden ser vistos desde la tierra como directos o retrógrados. Esto quiere decir que, desde ese punto de vista, se ve que avanzan o retroceden por el zodíaco. Este movimiento de ‘retroceso’ es aparente y tiene que ver con la relación entre la tierra, el planeta observado y el fondo fijo de estrellas”.
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