La Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) aseguró este viernes que la asistencia de espectadores en el partido Ecuador-Brasil fue menor que la permitida por las autoridades, pese a que el Ayuntamiento de Quito anunció un expediente sancionador por la supuesta violación de la norma que regula el aforo en los estadios.
En un mensaje en redes sociales, la FEF detalló que la suma de todos los asistentes al enfrentamiento disputado la víspera en la capital ecuatoriana fue del 44,05%, es decir, incluso menor al 50% requerido por las autoridades municipales en función de directrices epidemiológicas por la COVID-19.
Acudieron al encuentro 17.992 espectadores, mientras que el aforo permitido era de 20.320, de acuerdo al desglose de un reporte de asistencia difundido por la FEF.
La Alcaldía de Quito anunció este viernes que abrirá un expediente sancionador por una presunta violación de aforo en el partido disputado en el estadio Rodrigo Paz Delgado, en el que Ecuador y Brasil empataron 1-1 en un duelo de la fase de clasificación del Mundial de Catar.
“Durante el operativo de control en el estadio Rodrigo Paz Delgado, con base en el informe de Bomberos de Quito, se constató el incumplimiento de medidas de bioseguridad”, se quejó el alcalde Santiago Guarderas en redes sociales.
Y aseguró que “la Agencia Metropolitana de Control (AMC) iniciará el proceso administrativo sancionador”.
En su mensaje, el alcalde no especifica a quiénes van dirigidas las sanciones, dado que el partido era de la selección y, en principio, fue la FEF la que presentó la solicitud de aforo. El partido se disputó en el estadio de Liga de Quito.
Al respecto, la FEF afirma que se respetaron todos los protocolos de seguridad y se cumplió con el aforo establecido.
En un principio, el Comité de Operación de Emergencia (COE) Nacional, entidad encargada de gestionar la pandemia, resolvió que el encuentro se disputaría sin público debido al creciente número de contagios por COVID-19 en la ciudad.
Sin embargo, y tras una petición especial del presidente, Guillermo Lasso, el COE revirtió la decisión y autorizó el día previo al encuentro un aforo del 50%, unos 21.000 espectadores, bajo extremas medidas de distanciamiento entre ellos.
Según el alcalde, las medidas de prevención se incumplieron y durante la transmisión se pudo apreciar con claridad que el aforo parecía mayor que el permitido, que los aficionados no mantuvieron la distancia de bioseguridad y que muchos se retiraban la mascarilla.
EFE.