El año 2021, hubo el primer indicio de leve crecimiento de la economía y la terminación del proceso hiperinflacionario que llevaba ya varios años. Había transcurrido mucho tiempo sin haberse logrado avances, ni en lo económico, ni en la disminución de la diatriba política. Los enfrentamientos del gobierno, con los diferentes factores integrantes dentro de la oposición, se consideran como las razones principales para que no haya habido avances en la solución política. A esto se agrega la imposición de sanciones económicas al país desde el 2019 por parte de EEUU y algunos otros países de Europa y Sudamérica.
Nacionalmente, se han transferido parte de actividades económicas, al sector privado más cercano al gobierno -como en todas las administraciones.
A los factores externos, se agrega la negativa del Ejecutivo por muchos años de abrir la economía y reducir el peso y control por el Estado. En los años 2020 y 2021 se percibió, ya un cambio significativo en este sentido. Promovió la Ley Anti Bloqueo, para comenzar a abrir los espacios claves de la economía, que permanecían cerrados desde 2007.
Esto ha revivido el interés de los inversionistas internacionales, por ciertos sectores económicos. Ya que se han revertido algunas expropiaciones y se han abierto áreas antes reservadas de los llamados sectores estratégicos y soberanos como petrolero, minero, siderúrgico.
Aún restan avances esenciales en el sector eléctrico y petrolero, y que requieren grandes inversiones. Las sanciones no han permitido incorporarse al sistema financiero global y castigan incluso a inversores norteamericanos como Chevron con 100 años en el país, que parecen estar en reconsideración.
No tenemos dudas de la ineficacia de las sanciones, ya que estamos convencidos que no se debe sancionar a todos los habitantes y sería imperdonable que sigamos presenciando enormes pérdidas de oportunidades sobre todo en materia petrolera, cuando todo el sector a escala mundial está en una carrera contra el tiempo por las metas de la transición energética, y en el momento que el precio del petróleo ha pasado de $90 el barril.
Sin duda que lo racional es negociar gobierno-oposición bajo una fórmula ganar-ganar.
Ex presidente de Fedecamaras y Cámara Petrolera
@eromerovava