La Policía Nacional de Haití dispersó con gases lacrimógenos una manifestación de centenares de trabajadores que este miércoles reclamaban mejores condiciones salariales, en el contexto de la grave crisis económica y sociopolítica que atraviesa el país.
La protesta se realizó en frente de la Sociedad Nacional de Parques Industriales (SONAPI), el principal polígono industrial de la capital haitiana, dedicado en su mayoría a la confección textil dirigida a la exportación.
Los trabajadores exigían el aumento del salario mínimo de 500 a 1.500 gourdes (de 5 a 15 dólares) por jornada laboral de 8 horas, además de otros beneficios laborales, como subsidios al transporte y a la comida.
El secretario general de la Central Autónoma de Trabajadores de Haití (CATH), Fignolé Saint Cyr, explicó que hace dos años que no se reajusta el salario mínimo en el país.
El sindicalista recordó que, según la ley haitiana, cada vez que la inflación supera el 10 %, el salario mínimo debe ajustarse, y actualmente el alza de precios es del 24,6 % anual.
La manifestación fue reprimida por la Policía con gases lacrimógenos y, según el sindicalista, “hay mujeres heridas y embarazadas indispuestas”.
Los trabajadores pretenden volver a manifestarse el jueves, para defender “un salario digno”, según dijo Saint Cyr.
El salario de 500 gourdes diarios alcanza para pagar dos platos en los comedores populares, que cobran 250 gourdes (unos 2,5 dólares) por comida o cena.
Haití atraviesa una grave crisis económica, tras encadenar tres años de recesión, en el marco de una fuerte inestabilidad política, agudizada con el asesinato del presidente Jovenel Moise, cometido el pasado julio.
Unos 4,9 millones de personas, el 43 % de la población del país, requieren de ayuda humanitaria, según cálculos de la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA, por sus siglas en inglés).
EFE.