El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, expresó hoy la preocupación de la Alianza por que Rusia pueda orquestar una operación falsa que incluya la utilización de armas químicas en Ucrania, a la que ha acusado previamente de albergar ese tipo de armamento.
“Estamos preocupados por que Moscú pueda montar una operación de falsa bandera que posiblemente incluya armas químicas”, indicó Stoltenberg en una rueda de prensa previa a la reunión de ministros aliados de Defensa del miércoles, al tiempo que alertó de las “absurdas denuncias” de Moscú sobre “laboratorios bioquímicos y armas químicas en Ucrania”.
“Eso es sólo otra mentira”, comentó.
Stoltenberg dejó claro que si Rusia utiliza armas químicas se trataría de una violación de la ley internacional: “Pedimos que detenga el combate y, en particular, que no utilice armas químicas”, enfatizó.
En cualquier caso, Stoltenberg recordó que Rusia ya ha utilizado previamente agentes químicos para “atacar y matar a oponentes políticos” y que también facilitó su uso varias veces en la contienda siria.
Para Stoltenberg, Moscú busca “pretextos” para emplear armas químicas y “excusas” para el uso de la fuerza, como demuestran sus recientes acusaciones a Ucrania y a los países de la OTAN de que producen ese armamento, comentó.
Dijo que Estados Unidos y otros aliados ya han recalcado que si Rusia utiliza armas químicas, “pagará un alto precio” por ello.
El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, rechazó en la madrugada del viernes las acusaciones rusas de que en Ucrania haya armas químicas “ni otras armas de destrucción masiva”, y dijo que tales acusaciones son parte de la propaganda rusa para justificar su invasión.
“Los rusos dicen que presuntamente estamos desarrollando armas biológicas y que estamos preparando un ataque químico. Eso me preocupa realmente porque si tú quieres saber cuáles son los planes rusos, hay que ver de lo que los rusos les acusan a otros”, dijo Zelenski.
Stoltenberg aseguró que la principal responsabilidad de la OTAN es “defender y proteger a todos los aliados”, e insistió en que no va a hacer lo mismo que Rusia y no va a emplazar nuevos misiles balísticos intermedios con capacidad nuclear en suelo europeo.
En cambio, afirmó que van a reforzar su defensa aérea, apostar por capacidades como los aviones de quinta generación o incrementar la disposición y capacidad para controlar y detectar, así como asegurarse de que el disuasor nuclear de la Alianza siga siendo “eficaz”. EFE