Stoltenberg defiende reforzar presencia militar de la Otan en el Ártico como respuesta a Rusia

Stoltenberg defiende reforzar presencia militar de la Otan en el Ártico como respuesta a Rusia

Jens Stoltenberg

 

 

 





 

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, defendió este viernes que la Alianza refuerce su presencia militar en el Ártico como respuesta a la mayor actividad rusa en la zona, que calificó de gran importancia estratégica.

“Veo una necesidad de escalar y hacer más cosas juntos”, declaró en rueda de prensa en Bardufoss (Noruega) Stoltenberg, quien espera que la próxima cumbre de la Alianza en junio culmine con “decisiones concretas” para aumentar la presencia terrestre, marina y área en la región.

Stoltenberg aseguró que la OTAN no puede consentir un “vacío de seguridad” en el Ártico, ya que estima que podría “alimentar las ambiciones” de Rusia, exponer a la Alianza y hacer que aumenten los “malentendidos”.

La mayor presencia de la Alianza en el Ártico “no es para provocar un conflicto, sino para prevenirlo”, sostuvo.

“La guerra contra Ucrania es un cruce de caminos, una nueva normalidad para la seguridad europea y ártica”, afirmó el secretario general, de visita en las maniobras rutinarias Cold Response, que reúnen a 30.000 soldados de 27 países desde mediados de marzo hasta abril.

Stoltenberg considera que la “mayor amenaza” para la seguridad en el Ártico es el aumento de la actividad rusa, ya que aparte de probar sus nuevas armas, tiene allí la sede de su flota de submarinos.

Ejercicios como Cold Response, que se llevan haciendo cada dos años desde 2006, son una muestra de la mayor visibilidad de la OTAN, sostuvo su secretario general, que resaltó no obstante que se trata de maniobras defensivas y planeadas desde hace tiempo.

Las maniobras, que durarán hasta principios de abril, se desarrollan en el sureste, centro y norte de Noruega y tienen como objetivo reforzar la capacidad defensiva de este país miembro de la Alianza en condiciones meteorológicas exigente.

Stoltenberg calificó la guerra en Ucrania como “peligrosa” y “sin sentido” y llamó a acabarla “lo más rápido posible”.

Un hipotético ataque con armas químicas por parte de Rusia sería “completamente inaceptable” y una “flagrante” violación de las leyes internacionales, afirmó.

EFE