El ministro ucraniano de Transformación Digital, Mijailo Fédorov, anunció este martes la inauguración de un museo en línea de tokens no fungibles (NFT) que representan los puntos clave de la guerra que comenzó con la invasión rusa del pasado 24 de febrero.
“Es un lugar para salvaguardar el recuerdo de la guerra. Es un lugar para celebrar la identidad ucraniana y la libertad,” escribió Fédorov en su cuenta de Twitter.
El ministro destacó también que, mientras que Rusia “usa tanques para destruir Ucrania”, Kiev se apoya en la “revolucionaria tecnología de la cadena de bloques,” en referencia al sistema para garantizar las transacciones por internet en que se basa la venta de los NFT por parte del Museo.
El proyecto promete que el 100 % de las ganancias obtenidas de las ventas de NFT, que comenzarán este miércoles, irán a parar “a las cripto-cuentas oficiales” del Ministerio de Transformación Digital de Ucrania para “apoyar al ejército y a los civiles”.
Según detalla la página web del museo, “la fórmula de cada NFT es clara y simple: cada token es una noticia real de fuente oficial y una ilustración de un artista ucraniano o internacional,” que representan “cómo percibe la guerra la pacífica población de la soberana Ucrania”.
Las ilustraciones están organizadas por orden cronológico, de forma que la primera, atribuida al “Día 1” de la invasión, representa el anuncio por parte de Moscú de una “operación militar especial” en el Donbás.
Cada NFT tiene un precio de 0,15 Ethereum, lo que teniendo en cuenta la cotización de la criptomoneda de este martes son al cambio unos 465 euros.
Los NFT o tokens no fungibles son un tipo especial de archivo digital criptográfico que representa algo único y que no puede ser intercambiado, a diferencia de las criptomonedas u otros tokens que sí son fungibles.
El Gobierno ucraniano pide donaciones internacionales también en criptomonedas y a fecha del 25 de marzo había recaudado ya el equivalente a 60 millones de dólares, según anunció el viceministro de Transformación Digital, Alex Bornyakov.
EFE.