Los expendedores de pescados y especies marinas que laboran en el Mercado Municipal de Puerto La Cruz, calificaron de fantasiosos los precios de estos productos establecidos en la lista divulgada por la Superintendencia Nacional para la Defensa de los Derechos Socioeconómicos (Sundde), en conjunto con el Ministerio de Comercio, para la Semana Santa.
Por Javier A. Guaipo / Corresponsalía lapatilla.com
Los comerciantes manifestaron que, en caso de regirse por ese listado, trabajarían a pérdida puesto que ni siquiera en los mercados mayoristas venden a “precio justo”.
“Por citar un ejemplo. La raya, según ellos, se debe comercializar en Bs 11,44 por kilogramo, pero resulta que a mí me la vendieron en casi 15 bolívares. ¿Cómo yo ofrezco un producto a un costo menor al que pagué? Es ilógico por donde se le vea”, expresó Luis Díaz.
Vale destacar que la mencionada especie es una de las más utilizadas para preparar el “cuajao” y Díaz la vende en 18 bolívares por kilo. “Igual no se le gana mucho, pero la idea tampoco es abusar”.
El comerciante aseguró que ni la sardina se escapa del desastre, ya que el precio justo es de Bs 2,20, pero incluso comprándolas al mayor salen en 3 bolívares, aproximadamente.
Por otra parte, Eduardo Pedraza criticó que la lista de la Sundde no la respetan ni los chavistas. “Frente al elevado de la avenida Municipal (de Puerto La Cruz) pusieron una ‘feria del cuajao’ en la que muchas de las especies tienen un costo por encima del fijado”.
El expendedor utilizó también el ejemplo de la raya y aseguró que ahí la ofrecen en 15 bolívares.
El equipo de La Patilla se acercó al espacio donde se lleva a cabo la feria y se pudo constatar que algunos precios en efecto superan a los “justos”. Según una de las carteleras, el cazón y la cojinúa también tienen un costo superior al de la lista.
Peraza prosiguió diciendo que apenas salga de la mercancía que adquirió recientemente, no trabajará más para evitar alguna sanción injustificada. “Todos los días vienen funcionarios a darnos charlas y a decirnos que debemos apegarnos a la lista. Para evitar un mal mayor, prefiero dejar de trabajar por unos días”, finalizó.