Al menos 27 cadáveres calcinados han sido hallados tras la ocupación por parte de tropas del Ejército de Birmania de dos poblados en la región central de Sagaing, donde existe una férrea oposición al golpe de Estado militar de febrero de 2021, informan este lunes medios locales.
Los soldados ocuparon la semana pasada las poblaciones de Inpin y Mone Taing y tras su retirada el jueves los residentes comenzaron a encontrar cuerpos dentro de decenas de casas quemadas, según declaraciones de los vecinos al portal de noticias Myanmar Now.
En al menos dos casas, se encontraron seis cadáveres en cada una, apuntan los testigos al medio opositor a la junta militar.
Los residentes creen que las 27 víctimas mortales son vecinos secuestrados por los soldados durante las operaciones en el área, mientras que la sangre frente a las casas apunta, según testigos, a que fueron asesinados antes de quemar sus cadáveres.
Un hombre de unos 60 años, que escapó de los militares, asegura que los soldados capturaron a alrededor de un centenar de personas al llegar a Mone Taing, de las cuales al menos 30 fueron trasladadas como presos con las manos atadas en la espalda durante la retirada.
Birmania se encuentra sumida en una crisis desde el golpe de Estado militar del 1 de febrero, que ha abierto una espiral de violencia con nuevas milicias civiles que ha exacerbado la guerra de guerrillas étnicas que vive el país desde hace décadas.
Al menos 1.835 personas han muerto a raíz de la brutal represión ejercida por policías y soldados, que han llegado a disparar a matar contra manifestantes pacíficos y desarmados, conforme a los datos de la oenegé Asociación para la Asistencia de Presos Políticos (AAPP).
AAPP también contabiliza 13.682 personas arrestadas desde la asonada, mientras que según el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, el Ejército birmano ha cometido crímenes de guerra y de lesa humanidad, incluidos detenciones arbitrarias, tortura, muerte de civiles, quema de aldeas y ejecuciones extrajudiciales. EFE