Son los animales de compañía más misteriosos y tienen un maravilloso sistema de comunicación. Qué significa cada sonido
Los gatos hacen diferentes sonidos para comunicarse con otros gatos y con las personas, en diferentes situaciones.
Por Infobae
Esos sonidos pueden significar una agradable bienvenida, también los pueden hacer para calificar momentos reproductivos, como el cortejo, o pueden emitirlos como signo de hostilidad.
Los gatos hacen diferentes tipos de sonidos para comunicarse:
1. Murmullos con la boca cerrada
Dentro de esta categoría encontramos dos sonidos: el ronroneo y el gorjeo.
El ronroneo es uno de los sonidos más propios y característicos del gato, y es el que tiene la frecuencia más baja. Se produce por la contracción de los músculos laríngeos durante la respiración, con la boca cerrada. El volumen puede variar en función de la intensidad de la emoción que estén sintiendo.
Los gatos pueden ronronear en diferentes situaciones:
– Mientras los gatitos toman la teta de su madre.
– Mientras las madres dan la teta a sus gatitos
– Cuando duermen al lado o son acariciados por su individuo favorito.
– Mientras se les cepilla o se los acicala.
– Cuando buscan comida o atención de una persona.
También se ha visto que los gatos ronronean cuando sienten dolor, o cuando están muy enfermos, e incluso moribundos, poniendo en evidencia que el ronroneo no significa solamente algo agradable, y que al oírlo no debemos pensar únicamente que nuestro gato está feliz.
El gorjeo es un sonido muy característico que hacen los gatos para saludar. Es un sonido gutural que hacen con la boca cerrada y lo hacen cuando están contentos.
2. Sonidos vocales que hacen abriendo y cerrando la boca
El maullido es un sonido reservado para la comunicación con los seres humanos tal vez surgido en el gato doméstico como la imitación forzada de la voz humana para poder comunicarse con nosotros de manera más eficiente y directa.
Los gatos no se maúllan entre sí. Se gruñen, se gritan, pero no se maúllan.
Pero no todos los gatos maúllan igual.
Los gatos de la casa hacen maullidos más cortos y más agudos que los gatos ferales, lo que demuestra que los gatos domésticos, han coevolucionado, en este aspecto, al convivir con el hombre.
Los maullidos tienen diferentes entonaciones, tonos y duraciones. Quienes conviven con gatos reconocen sus diferencias y para qué los está haciendo. Hay maullidos de reclamos de juego, para pedir comida, para saludarnos.
– Sonidos de hembra en celo. Agudos y largos, los podemos escuchar en épocas en celo de las hembras y con ellos atraen a los machos.
– Castañeteo. Lo hacen cuando los gatos ven presas, pero no pueden acceder claramente a ellas, como puede ser un pajarito que esté al otro lado de la ventana, o una mosca a la que no la consigue cazar.
No se conoce realmente el porqué de este sonido, pero se han barajado varias hipótesis:
– Manifestación de la frustración por no poder alcanzar la presa.
– Ritual de anticipación a la caza.
– Imitación del sonido de la presa para al mimetizarse y poder cazarla mejor.
3. Sonidos de tensión que se producen con la boca abierta
Generalmente comunican emociones negativas como el miedo, la frustración y el dolor
– Gruñidos: se emiten en los momentos de enojo. Se oyen durante las peleas entre gatos.
– Bufido: son de diferente intensidad y duración. Significan que se aleje o una advertencia de mantener distancia.
– “Escupido”: un sonido corto, que acompaña al bufido, que realiza en situaciones muy tensas. Lo hacen contra otro gato o persona, e incluso contra objetos a los que les tengan temor.