Un joven de 19 años estaba pasando sus primeras horas de vacaciones en España cuando no tuvo mejor idea que zambullirse a la una de la mañana en una enorme piscina del Oceans Beach Club Magaluf de Mallorca. Convencido, se tiró de cabeza al agua, pero le erró al cálculo y dio casi inmediatamente contra el suelo de la pileta.
Por: Clarín
Según El Diario de Mallorca, el turista, que sería de origen noruego, saltó equivocadamente en una zona de la piscina de solo medio metro de profundidad. Tras el choque, el muchacho habría sufrido fractura cervical y un grave traumatismo craneoencefálico.
Los médicos que acudieron al lugar primero le estabilizaron sus constantes vitales y le inmovilizaron la columna vertebral para evitar lesiones aún mayores de las que presentaba. Luego, lo trasladaron de urgencia a cuidados intensivos del Hospital Son Espases, donde actualmente se encuentra visto muy de cerca.
Si bien no hay un informe oficial del estado actual del joven, medios locales se atrevieron a difundir que podría haber quedado “paralizado” de por vida.
Sí confirmó Son Espases, el sanatorio ubicado en la capital de la isla de Mallorca, Palma, que su estado es “grave”.
Agentes de la Guardia Civil investigan el incidente y los servicios de emergencia activaron un psicólogo para que atendiera a los amigos de la víctima. El episodio se comunicó al Consulado de Noruega para que lo transmitieran a su familia.
Primer “balconing” del año
El del turista noruego no fue el único accidente en la zona en estos días. El 12 de mayo, otro turista, en este caso británico, cayó desde el séptimo piso de su hotel en Magaluf y murió. Se trata del primer balconing fallido del año, indica el Diario de Mallorca.
Los testigos grabaron al sujeto cuando lo vieron arriesgar su vida caminando de un lado a otro por la estrecha repisa en el exterior del balcón del hotel en el que se alojaba. En un momento se puede ver que el hombre queda sostenido solo por sus manos y cómo, al no aguantar más, cae al suelo.
Las asistencias sanitarias del Ib-salut acudieron en una UVI móvil, pero solo pudieron certificar su defunción. También se movilizaron agentes de la Policía Local de Calvià y efectivos de la Guardia Civil.
La policía, por su parte, dijo que el hombre de 34 años podría haber estado drogado o alcoholizado al momento de realizar la extraña maniobra.