Dos plantas potabilizadoras de agua existen en el municipio Torres del estado Lara y entre ambas, tienen una capacidad para enviar unos 600 litros de agua por segundo a la ciudad capital, Carora, pero llevan poco más de cinco años inoperativas y sus espacios hoy lucen abandonados y desvalijados.
Por: Corresponsalía La Patilla
Los caroreños, desde antes de la pandemia se encuentran consumiendo agua cruda y sin ningún tipo de tratamiento, situación que mantiene en riesgo la salud de sus habitantes.
Las plantas potabilizadoras de Carora, se encuentran ubicadas en Sabaneta y San Vicente, respectivamente y hoy, sus instalaciones son una clara radiografía de la ineficiencia por parte del régimen chavista en la región a quienes se les ha ido de las manos el servicio hídrico en general.
Comentan los pocos operadores que quedan en estas plantas que únicamente están de “vigilantes” ya que todos los equipos y mobiliarios se los llevó la Gobernación de Lara a la ciudad de Barquisimeto.
En ese sentido, desde que las plantas fueron desocupadas, las instalaciones se han venido abajo y en una de ellas, existe una familia viviendo en sus espacios que hasta son usados como potreros de animales.
El 100% de la población en Carora no reciben agua tratada y la mayoría de las veces, el agua llega turbia, con malos olores y hasta animales incorporados aumentando la vulnerabilidad en la salud de todos los caroreños.
