La Fiscalía General de Colombia hizo pública una secuencia de videos en los que se muestra el modus operandi paso a paso de los presuntos asesinos del fiscal antidrogas de Paraguay, Marcelo Pecci, el martes 10 de mayo pasado en la isla de Barú, en inmediaciones de Cartagena de Indias, Colombia.
Por infobae.com
En el material audiovisual recopilado por el ente investigador, se aprecia cómo tres personas vinculadas en este caso se registran en un hotel de Cartagena y, horas después, salen con rumbo a Barú para, presuntamente, cometer el delito contra el funcionario paraguayo. La Fiscalía además mostró el momento en que los involucrados, de aparente nacionalidad venezolana, alquilan un jet ski, medio de transporte con el que se habría cometido el homicidio.
Video
Segundos después, en otro video se aprecian los movimientos del fiscal Pecci, su esposa y de los señalados delincuentes, minutos antes del asesinato.
Así fue la explicación de la fiscalía de cómo sucedió el crimen antes de la muerte:
En los círculos rojos están los movimientos del fiscal Pecci y su esposa. En los círculos amarillos los desplazamientos de los señalados delincuentes. En un momento se ve a la señora Marisol Londoño Bedoya y a su hijo hacer seguimientos a la víctima. Se meten al mar, levantan los brazos y dan indicaciones sobre el punto al que debe llegar la moto náutica con el presunto sicario. Luego el círculo amarillo muestra el ataque al fiscal Pecci
Marisol Londoño Bedoya (marcadora), Francisco Luis Correa Galeano (articulador y financiador), Cristian Camilo Monsalve Londoño (marcador), Eiverson Adrián Arrieta Zabaleta (conductor y logística) y Wendre Still Scott Carrillo (quien disparo al fiscal) son las personas que ya fueron capturadas por el homicidio.
De los implicados, cuatro aceptaron los cargos de homicidio agravado y porte ilegal de armas agravado, menos Correa Galeano.
Así habría sido planeado el macabro delito trasnacional
Según pudo conocer Noticias RCN, la persecución al fiscal habría comenzado el 5 de mayo mientras el fiscal y su esposa recorrían Cartagena de Indias, hospedándose a su paso en el hotel Decameron Barú.
A la par, ese mismo 5 de mayo se habrían reunido seis personas (de las cuales cinco eran hombres) en la plaza minorista de Envigado, en Antioquia, para planear el asesinato del paraguayo.
En tres grupos y utilizando agencias de viajes, una mujer y un sujeto de 23 años hicieron una reserva en un prestigioso un hotel de Cartagena para hacerle seguimiento al fiscal y reportar cada uno de los movimientos del funcionario guaraní y de su esposa.
El 6 de mayo, dos venezolanos y un colombiano habrían llegado a un apartamento en el sector de El Laguito. Los extranjeros tenían la misión de asesinar a Pecci y el tercero (cartagenero) debía vigilar toda la operación de para llevarlos al lugar y finalmente sacarlos de ahí.
El encargado de orquestar el crimen desde Envigado, viajó por aire desde Medellín hasta Santa Marta el 6 de mayo y, desde la capital magdalenense, tomó un vehículo por tierra para llegar a Cartagena. Además, se hospedó en un edificio en un sector lujoso de la ciudad, cerca a donde estaban sus cómplices, mientras en la recepción dejó autorización para el ingreso de los autores materiales del asesinato en cuestión y hablar todo en privado.
Por otra parte, el encargado del transporte alquiló un vehículo de gama media un día antes del asesinato y se reunió con el jefe de la banda para pagar 2,7 millones de pesos y coordinar el ingreso como turistas de un hombre y una mujer, que desde el hotel Decameron Barú vigilaron más de cerca cada movimiento del fiscal Pecci.
Las autoridades dan cuenta de un recorrido previo al día del crimen con aproximadamente 60 llamadas telefónicas intercambiadas entre los hoy detenidos, quienes también se hicieron pasar por turistas.
Finalmente, el 10 de mayo los encargados de disparar salieron antes de las 6:00 a. m. del sector de El Laguito en Cartagena; con el carro alquilado se dirigieron hasta Playa Blanca –donde los dos venezolanos a su vez alquilaron la moto acuática de color rojo usada en el delito– y ahí quedaron grabados en cámaras por primera vez.
Quien porta el sombrero en las cámaras de seguridad es un hombre de 31 años nacido en Venezuela. Mientras tanto, la mujer y el joven que siguieron de cerca al fiscal y a su esposa arribaron en cinco minutos al lugar. Le dispararon en tres ocasiones por la espalda y huyeron del sitio. El hombre habría sido el responsable de jalar el gatillo.
Acto seguido, los involucrados escaparon de la playa, devolvieron la moto y el último reporte en suelo costeño los ubica en la Terminal de Transportes de Cartagena tomando una flota que partió en Cartagena con rumbo a Medellín.