El secretario general de la ONU, António Guterres, alabó este lunes el trabajo de Michelle Bachelet, que anunció que no buscará continuar como Alta Comisionada para los derechos humanos, y aseguró que la expresidenta chilena ha logrado importantes avances durante su mandato.
“Estoy profundamente agradecido a Michelle Bachelet por su incasable servicio a Naciones Unidas como Alta Comisionada para los derechos humanos. Desde sus primeros días en Chile y con enorme sacrificio personal ha estado en primera línea de la lucha por los derechos humanos toda su vida”, señaló Guterres en un comunicado.
El jefe de la ONU aseguró que durante su mandato Bachelet ha ofrecido resultados “en un contexto político extremadamente difícil” y ha “marcado una gran diferencia para personas de todo el mundo”
“En todo lo que ha hecho, Michelle Bachelet vive y respira los derechos humanos”, subrayó Guterres, que dejó claro que la alta comisionada sigue teniendo su total apoyo.
“Siempre valoraré su sabiduría, su fuerte voz y su éxito para garantizar que los derechos humanos sean la base de las acciones de Naciones Unidas”, insistió.
Bachelet, cuyo actual mandato acaba a finales de agosto, anunció este lunes que no buscará ser reelegida por “motivos personales”, pues desea regresar a su país y a su familia.
La expresidenta de Chile aseguró que su salida no tiene relación con las críticas que ha recibido por su reciente viaje a China, cuyo objetivo principal era verificar las denuncias sobre represión y abusos contra la minoría musulmana uigur, asentada en la provincia noroccidental de Xinjiang, pero cuyas conclusiones sonaron demasiado suaves.
“El viaje no pudo ir mejor para el Gobierno chino en su esfuerzo por ocultar las detenciones masivas y los abusos en Xinjiang”, criticó el director de la prestigiosa oenegé Human Right Watch, Keneth Roth, quien calificó la visita de “completo desastre”
Guterres fue quien propuso a Bachelet para el cargo, una decisión que luego ratificó la Asamblea General de la ONU.
Aunque puede optar a la reelección, es habitual que los altos comisionados para los derechos humanos ocupen su puesto durante un único mandato, pues están expuestos a un gran desgaste.
De hecho, la única que optó por ello fue la jueza india Navy Pillay y ni siquiera por un segundo mandato completo, sino por un medio mandato de dos años (entre 2008 y 2014).
EFE