Todos los 24 de junio se conmemora la Fiesta de San Juan y a la medianoche se realiza la mítica Noche de San Juan con fogatas y muchos rituales ya que se considera, en el hemisferio sur, que es la noche más larga del año.
Por clarin.com
Por eso esta medianoche es la oportunidad perfecta para realizar rituales para atraer, sobre todo, la suerte y la abundancia.
La víspera de San Juan coincide, en el hemisferio sur, con el solsticio de invierno; y en el norte con el verano. Allí es el día más largo del año y, por lo tanto, es seguido por la noche más corta.
En ambos casos es, sin duda, una noche de celebración y alegría. La gente da la bienvenida al verano o al invierno y celebra como un signo de renacimiento y vida renovada.
Rituales para la noche de San Juan
El primero es con huevo y sirve para atraer la abundancia. Se debe romper uno en agua, y es uno los clásicos de esta jornada. Ayudará a atraer lo mejor para el resto del año.
La forma de realizarlo es colocar un vaso de agua en una ventana abierta y colocar al lado el huevo. Apenas llegue la medianoche debe cascarse el huevo y verter el contenido sobre el vaso.
Se debe dejar el recipiente con el huevo toda la noche y, a la mañana siguiente, se podrá observar si la clara flota o se hunde. Si sucede lo primero, será un año lleno de abundancia. Si sucede lo segundo, se podría dar lo contrario.
Lavanda para el amor?
Un baño de lavanda es ideal para purificar el ambiente y limpiar diversos aspectos del espíritu. Es necesario hacer un baño con las flores de esta planta durante la madrugada. Se debe agregar esencia de lavanda, pétalos de rosa y, por supuesto, flores de lavanda.
Al finalizar untarse con una infusión de lavanda para terminar de llamar al amor.
Por último, el último ritual se realiza con canela para atraer la abundancia y la suerte en la Noche de San Juan. En este caso, hay que espolvorear un poco de canela en polvo entre las manos, pararse en la puerta del local o de la cosa y soplar de afuera hacia dentro.
Con estos pasos se atrae la fortuna comercial o en la economía doméstica.
La noche de San Juan
La medianoche del 23 al 24 de junio es una de las fiestas más antiguas de la Iglesia. Es la celebración del cumpleaños de San Juan Bautista. En la víspera de la fiesta, se encendían grandes hogueras como símbolo de la luz “ardiente y brillante”, San Juan, que señalaba a Cristo en este mundo de tinieblas.
Las hogueras del solsticio habían sido paganas, pero fueron bendecidas. Se olvidaron los elementos mágicos y supersticiosos de la comida y la bebida, y se nos animó a celebrar al aire libre alrededor de los troncos ardientes.
Hay todo tipo de alimentos especiales que se utilizan en la fiesta de San Juan. Cada país contribuye a la alegría y a la fiesta. No hay comunión mundial tan genuina como la del cuerpo místico de Cristo que celebra.
En México es un día para bañarse, cantar, bailar y comer. Se llevan grandes cestas de tamales de pollo y pimientos rellenos a las fiestas de baño. En Suecia, el salmón y las patatas nuevas eran el plato principal y las fresas el postre preferido.
Sin embargo, fue Letonia la que hizo de esta fiesta una fiesta nacional, y cada hombre o niño con el nombre de San Juan era honrado. En todas las casas se abría la puerta y se ponía la mesa con embutidos servidos con rábano picante rallado, pan, mantequilla, miel y cerveza dulce.