El titular de la cartera de Gales, Simon Hart, se ha convertido en el tercer ministro en dimitir del Gobierno británico desde el martes en protesta contra la continuidad del jefe del Ejecutivo, Boris Johnson.
En un carta que él mismo difundió a través de sus redes sociales, Hart señala que trató “desesperadamente” de seguir en el Gobierno, pero que no le “quedó otra opción” que presentar su renuncia.
En la misiva, le dice a Johnson que tanto él como otros compañeros del gabinete han intentado “en público y privado ayudarte a enderezar el barco, pero siento con tristeza que ya hemos pasado el punto en el que eso era posible”.
“Había deseado desesperadamente que podría evitar escribir esta carta, pero no parece quedar otra opción que renunciar como ministro para Gales”, escribió Hart.
Tras elogiar la “energía, visión, determinación y humor” de su antiguo jefe y agradecerle por la oportunidad que le dio, Hart reconoció que nunca ha sido un “gran fan” de las dimisiones ministeriales como herramienta para forzar cambios, pero que en esta ocasión constata que ya es tarde para cualquier rectificación.
La renuncia de Hart se suma a la de los ministros de Economía, Rishi Sunak, y Sanidad, Sajid Javid, que este martes hicieron lo mismo, aunque el total de cargos gubernamentales que han dimitido en las últimas horas asciende ya a 44.
Además, el primer ministro ha cesado al ministro de Cohesión Territorial, Michael Gove, quien le había reclamado previamente abandonar su puesto.
Casi en paralelo al anuncio de Hart, la abogada general del Estado, Suella Braverman, hasta ahora una de los apoyos más fieles de Johnson, dijo en una entrevista televisada que “su tiempo (el del primer ministro) se ha acabado, y ahora debe hacer lo correcto”, aunque no anunció su dimisión.
Y acto seguido Braverman reveló que piensa postularse como candidata a suceder a Johnson como primera ministra por el Partido Conservador.
EFE