Muchas veces las personas no son lo que aparentan. Robert Hansen, un hombre con rasgos de hombre bueno y tranquilo, secuestró, violó y mató a 17 prostitutas en Alaska, Estados Unidos.
Por Clarín
Los terroríficos asesinatos ocurrieron durante 1970 y 1983, lugar donde, tras violar a sus víctimas, las dejaba libres para luego perseguirlas y cazarlas como animales con su rifle.
Una infancia complicada
Robert Hansen nació el 15 de febrero de 1939 en Estherville, Iowa, Estados Unidos. Su padre era un cocinero danés muy estricto y obligaba a trabajar al pequeño Robert hasta la madrugada en la panadería familiar.
Robert, durante su adolescencia, fue víctima de bullying y desarrolló un carácter introvertido, solitario y poco sociable. Hasta que un día, justo cuando se graduó, decidió vengarse de quienes le molestaban. Prendió fuego a un autobús del instituto.
Pasó el tiempo y en 1966 se casó y tuvo dos hijos. Un año después la familia decidió mudarse a Alaska. Abrieron una panadería ganándose el respeto y la admiración de sus vecinos quienes lo veían como un tipo callado y tranquilo, pero gentil.
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