Usuarios del transporte público de las rutas del occidente de Carabobo-Nirgua, denuncian que es todo calvario trasladarse de un estado a otro.
Por Corresponsalía
Gustavo Hernández, es de Bejuma, Carabobo, viaja al menos dos veces a la semana a Nirgua, estado Yaracuy, por motivos laborales y cuenta que para viajar debe llenarse de paciencia, pues puede pasar hasta una hora esperando un autobús.
Relató que a eso de las 5:00 am debe llegar a la carretera Panamericana, justo a la entrada del poblado a esperar alguna de las unidades que va a Nirgua, porque los buses no entran al pueblo como anteriormente lo hacían.
“Con suerte agarro una antes de las 6:00 am, pero es muy raro, uno debe ir preparado a que va a perder por lo menos una hora esperando transporte”, contó.
Señaló que otra opción es trasladarse a Miranda, en donde hay una línea de carritos por puesto que va a Nirgua. “Casi siempre hay carrito, es más rápido y seguro, pero se gasta un poco más”, explicó. Detalló que el pasaje en bus está en 3 dólares y en carrito en $5.
Baja afluencia de pasajeros
Isbeth Pinto, es una de las encargadas de las líneas de transporte que hace vida en el terminal de Nirgua y que cubren la ruta a Carabobo.
Explicó que las salidas de las unidades dependen de la cantidad de pasajeros, dijo que la afluencia ha mermado y no es rentable que una unidad salga a hacer el recorrido con solo dos o tres personas, por lo que deben esperar a que cargue una cantidad razonable.
Indicó que hay tres líneas que cubren esta ruta: Independencia, Expresos Nirgua y Tamanaco, más la línea de carritos, que consideró ha influido negativamente pues está a escasos metros del terminal y les quita pasajeros.
Douglas Cedeño, transportista, manifestó que ha bajado considerablemente la afluencia de pasajeros. En su opinión, esto puede ser por el tema económico, debido a que mucha gente que viajaba a diario a trabajar o estudiar, ya no lo hace porque el sueldo no alcanza. Precisó que cada 45 minutos aproximadamente sale una unidad con los pasajeros que tengan, si hay suficientes sale antes de lo previsto.
Daniela Hernández, esperaba en el terminal de Nirgua por la salida de la unidad, “tengo como media hora aquí, hasta que ellos (los conductores) no vean que se llena, no salen”, afirmó.
A su juicio, los pasajeros no deberían pagar las consecuencias de la baja afluencia de personas, “el tiempo de uno vale, entonces pasamos un buen rato aquí sentados esperando que ellos quieran arrancar”, comentó.
Aunque los transportistas aseguraron que cuentan con suficientes unidades, hay días que, aunado al tema de la poca afluencia de pasajeros, trabajan la mitad de los carros porque el resto debe hacer largas colas para equipar combustible, ya que no tienen prioridad pese a ser un servicio público, “a veces pasamos todo el día en una cola y eso incide en el servicio”, indicó un transportista.
Tanto usuarios como transportistas añoran los tiempos de bonanzas y esperan que en algún momento se ponga fin a las fallas en el suministro del combustible para poder retomar sus labores cotidianas sin contratiempos.
