El presidente de China, Xi Jinping, abordó hoy con sus homólogos de Uzbekistán, Shavkat Mirziyóyev, y de Tayikistán, Emomalí Rajmón, la situación en Afganistán y prometió a los dos países que seguirá cooperando con ellos en materia de seguridad y apoyando el proceso de paz en ese país centroasiático.
En sendas reuniones mantenidas en los márgenes de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), que arranca hoy con una cena oficial pero cuya parte principal solo empezará mañana, Xi abordó temas bilaterales y regionales con sus dos homólogos.
Los tres países comparten frontera con Afganistán.
Según la presidencia tayika, Xi dijo a Rajmón que la parte china “comprende la preocupación de Tayikistán por la situación en Afganistán y los problemas regionales relacionados, y está lista para continuar una estrecha cooperación en el campo de la seguridad y el fortalecimiento de la frontera”.
De acuerdo con la oficina de prensa de la presidencia de Uzbekistán, en la reunión entre Mirziyóyev y Xi “se enfatizó que es importante continuar los esfuerzos para apoyar el proceso de paz y la recuperación económica en Afganistán (…)”.
Xi firmó con ambos presidentes una serie de acuerdos: tres con Tayikistán en el campo de la economía verde, la economía digital y la construcción de la segunda fase de una carretera entre Dusambé y el puerto montañoso de Kulma.
Con Uzbekistán suscribió 15 documentos, especialmente acuerdos de cooperación en los ámbitos del comercio, la economía y de inversión por valor de 15.000 millones de dólares, según la Presidencia del país centroasiático.
Mirziyóyev también le entregó a Xi el mayor galardón estatal, la orden de “Amistad de Alto Nivel”.
El presidente chino es el primer jefe de Estado extranjero en recibir esta orden.
Al entregar este premio, el presidente uzbeko señaló que el presidente chino hizo una gran contribución a la amistad centenaria y la asociación estratégica integral entre los dos pueblos, al fortalecimiento de la confianza y el entendimiento mutuo, y a la expansión de las relaciones económicas, culturales y humanitarias.
EFE