La primera ministra británica, Liz Truss, y el presidente de EEUU, Joe Biden, condenaron la movilización parcial anunciada por el presidente ruso, Vladímir Putin, y resaltaron la importancia del apoyo a Ucrania cuando se reunieron el miércoles en la ONU, informó este jueves la residencia de Downing Street.
“Los líderes condenaron las recientes declaraciones beligerantes de Putin sobre Ucrania. Estuvieron de acuerdo en que sus acciones resaltan la necesidad de que los aliados continúen con su apoyo económico y militar a Ucrania”, indica un comunicado del Gobierno.
Según Downing Street, Truss actualizó a Biden sobre su reciente anuncio de que el Reino Unido mantendrá su compromiso de facilitar apoyo militar a Ucrania en 2023 y los dos líderes abordaron “la creciente amenaza que representan las autocracias”.
Entre otras cosas, Truss y Biden pusieron énfasis en la necesidad de poner fin a la dependencia energética, así como de tecnología, de los estados autoritarios, agregó Downing Street.
“Acordaron redoblar los esfuerzos bilaterales para reducir la dependencia energética de Rusia y aumentar la cantidad de energía renovable y otras formas de energía que fluyen de los estados democráticos”, añadió.
Esta semana, el Reino Unido se comprometió a igualar en 2023 la ayuda militar facilitada a Ucrania este año, estimada en 2.300 millones de libras (2.622 millones de euros).
Putin justificó la movilización de reservistas por considerar que el objetivo de Occidente es “debilitar, dividir y destruir” a su país.
EFE