Más de 400 jóvenes del municipio Pueblo Llano en Mérida han emprendido en los últimos días el recorrido que los llevará a cumplir el sueño americano, y desde los Estados Unidos lograr el propósito de gozar con una mejor calidad de vida para sus familias, asunto que en Venezuela durante los últimos años, a pesar del esfuerzo y el optimismo, se convirtió en un propósito inalcanzable.
Por Corresponsalía
Ciro González, oriundo de Pueblo Llano, y quien el pasado 8 de septiembre emprendió con un grupo de más de 20 compatriotas la ruta con destino final a los Estados Unidos, relató que la travesía no es nada fácil, son largas horas de caminata y muchos obstáculos para llegar al país del norte.
Muy seguido salen autobuses con decenas de jóvenes merideños que toman la decisión de abandonar su terruño y emprender una travesía por la selva del Darién, entre Colombia y Panamá, arriesgando también sus vidas y recorriendo trayectos completamente desconocidos e inhóspitos.
“Un recorrido lleno de obstáculos desde el mismo momento cuando dejas de tocar el suelo venezolano, donde te conviertes en un número, en uno más de los 6 millones de inmigrantes venezolanos que un día tomaron la decisión buscar nuevos horizontes”, contó.
Cada país de la ruta es una realidad distinta. Encuentran muchas trabas por parte de los cuerpos de seguridad migratorios en los pasos fronterizos, cobros de “vacuna” para dejarlos seguir, amenazas y hasta advertencias de decomiso de los pocos documentos que llevan consigo. La mayoría de los migrantes venezolanos apenas cargan encima la cédula de identidad.
El tapón del Darién, que lo atravesaron caminando según el relato de González, se extiende por más de 100 kilómetros entre el noreste de Colombia y el suroeste de Panamá.
El recorrido que hizo el grupo de jóvenes tardó cinco días, luchando con las inclemencias del clima y los obstáculos propios del ecosistema selvático.
En cada país debieron pagar transporte y “vacuna” para seguir su camino a paso lento, con el sudor en la frente y el cansancio a flor de piel, pero con el alma fuerte hasta lograr su cometido.
Venezuela, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, El Salvador, Honduras y México son los países recorridos durante más de 20 días, lo que totaliza más de 4.500 km andados hasta pisar el suelo estadounidense.
Ciro González dijo que ha gastado al menos 1.300 dólares entre los pagos de vacuna, camionetas, pasos fronterizos y alimentación durante el recorrido.
La esperanza de un mejor porvenir es lo último que pierden los venezolanos que salieron del país por distintos caminos para alcanzar sus sueños en tierras lejanas, dejando atrás sus vidas para empezar de cero como extraños e inmigrantes.