“Vatican Mall”, el lujoso y polémico centro comercial que será inaugurado a pocos metros de la basílica de San Pedro

“Vatican Mall”, el lujoso y polémico centro comercial que será inaugurado a pocos metros de la basílica de San Pedro

Una vista general de una plaza vacía de San Pedro mientras el Papa Francisco ofrece a su audiencia general semanal a través de un video transmitido un día después de que el Vaticano cerró la plaza y la Basílica debido a preocupaciones por el coronavirus, como se vio desde Roma, Italia, el 11 de marzo de 2020. REUTERS / Guglielmo Mangiapane

 

 

 





 

“Vatican Mall”: así se llamará el nuevo y lujoso centro comercial que se abrirá en noviembre en un inmueble propiedad del Vaticano, a pocos metros de la basílica de San Pedro y que está dando que hablar ante la contradicción que supone con la “Iglesia pobre para los pobres” que defiende el papa Francisco.

Desde el Vaticano matizan a EFE que los locales del futuro centro comercial forman parten de la sociedad italiana “Terminal Vaticano”, que alquiló la propiedad a la Congregación para la evangelización de los pueblos, ex Propaganda Fide, y donde ya existe un aparcamiento, sobre todo para autobuses turísticos.

La gestión de algunos de estos ha pasado ahora a la sociedad Galak, que es la que ha decidido abrir allí el centro comercial.

“Nuestra empresa, Gasak Srl, no tiene relaciones directas con la propiedad (el Vaticano) sino con Terminal Vaticano Srl que, a su vez, gestiona todo el edificio de varias plantas en nombre de la propiedad”, explicaron a preguntas de EFE.

Pero esta explicación no gusta a muchos en el interior de los muros vaticanos, que critican que a pocos metros de la plaza de San Pedro y donde cada noche duermen decenas de personas sin hogar surja un centro comercial con “sólo las mejores marcas nacionales e internacionales” y que garantiza que los productos estarán “libres de impuestos” para los ciudadanos de fuera de la UE, según indica en su página web.

El símbolo del centro comercial para atraer a los turistas no deja dudas: la silueta de la Basílica de San Pedro, con la columnata de Bernini, y una frase escrita que es un reclamo del Vaticano: “Vatican Mall”.

Para este proyecto, aseguran los medios italianos, se ha contado con el aval del cardenal filipino Luis Antonio Tagle, que también es presidente de Caritas Internationalis y prefecto de la ex Propaganda Fide, actualmente englobada en el ministerio para la Evangelización, presidido por el papa, según la última reforma.

Muchos recuerdan que hace unos años también hubo muchas críticas por el alquiler de los locales pertenecientes a la Santa Sede, en Via del Mascherino y Via della Conciliazione, en las inmediaciones de la plaza de San Pedro, a negocios como McDonald’s o Hard Rock Café.

Desde la sociedad Galak explican que la inauguración está prevista para noviembre: será uno de los alicientes turísticos para el Jubileo que la Iglesia católica celebrará en Roma en 2025 y en el que se esperan millones de peregrinos.

Según se describe en la página web, el centro comercial contará con “57 tiendas que acogerán una selección de marcas ‘made in Italy’ e internacionales con un fuerte espíritu creativo y artesanal, desde la ropa hasta los accesorios y el calzado, pasando por la joyería, las creaciones para el hogar, los cosméticos e incluso la comida y el vino en el pabellón gastronómico”.

También explican no faltarán actividades con fines benéficos, en lo que quizá pueda ser un guiño para acallar las críticas.

Además, en el apartado “Glamour social” de la web, “Vatican Mall” afirma que “tiene la intención de lanzar campañas sociales para apoyar los derechos humanos, seleccionando y calificando productos y servicios como glamour social”.

Y en la temática “Caridad” aseguran que “el enfoque de Vatican Mall encarna el espíritu de construir un puente hacia los demás, con un apoyo concreto y continuo para las organizaciones humanitarias y de atención médica y un enfoque especial en los problemas sociales”.

Sobre si estas actividades serán concordadas con el Vaticano, Galak explica que “por el momento estas serán organizadas de forma independiente”.

EFE