Esta noche, después de más de una década, se reveló el testimonio de Diana Bazán Hidalgo, quien narró a través de ATV Noticias, la terrible historia que le tocó vivir, mientras se desempeñaba como cadete de la FAP.
Por: Infobae
Desde hace 15 años, esta mujer convive con el recuerdo de haber sido violentada sexualmente por su superior, quien destruyó los sueños de la joven, que anhelaba trabajar por su país desde los aires, pero de manera repentina, “le cortaron las alas”, cuando apenas emprendía el vuelo.
“Mi nombre es Diana Bazán, he sido víctima de abuso sexual en la Escuela de Oficiales de la Fuerza Aérea del Perú. Como todo joven tuve una ilusión de servir a mi país. Fue una etapa bien dura para mi”, comentó entre lágrimas.
Según reveló por primera vez, los hechos ocurrieron dentro de las instalaciones de la mencionada institución, el 15 de diciembre del 2007, cuando el teniente FAP Jesús Ferreyra Gala entró ebrio a su cuarto y le destruyó los sueños con violencia.
“Me encontraba de servicio dentro de la escuela cumpliendo una función y esta persona irrumpió en mi cuarto dentro de donde yo me encontraba” explicó la víctima al medio de comunicación desde Bélgica, tratando de mantener la calma y fuerza para seguir con la entrevista, pero es inevitable que se quiebre al recordar esa terrible situación.
Asimismo, indicó hace algunas horas en televisión nacional, que cuando denunció el hecho ante sus autoridades, no le prestaron la atención indicada, es más, reveló que su atacante, fue ascendido a grado de teniente, 3 meses después de lo sucedido.
“Nunca recibí apoyo de mis autoridades, es más, comencé a sufrir acoso de parte de los cadetes. A mi promoción los hacían salir fuera de la rutina y empezar a hacer ejercicios en forma de castigo por lo que denuncié, incluso gritando mi nombre”, precisó con los ojos llorosos.
Fue internada
Otro dato revelador de Diana Bazán, es que fue internada sin conocimiento de sus padres en el área de psicología del hospital de las Fuerzas Armadas, donde según manifestó, la mantenían dopada para evitar todo tipo de contacto con sus familiares y amigos.
“Me encontraba prácticamente todos los días dopada, nadie podía irme a visitar, no podía ver a nadie, todo el día dormía porque me tenían con pastillas”, señaló ante las cámaras de ATV, donde demuestra hablar de este tema, a pesar que sucedieron hace más de 15 años, aún le afecta en demasía.
Meses después de realizar la denuncia, de acuerdo a lo que contó la víctima hace algunas horas, fue dada de baja de la Escuela de Oficiales de la Fuerza Aérea del Perú, por intentar atentar contra su vida tras un cuadro de depresión severo en el que se encontraba.
Resolución
De acuerdo a un documento oficial de la FAP, se indica que la causa de la baja fue intento de suicidio no adquirido en consecuencia en actividad o servicio.
“Me sentí maltratada por la institución, fue una experiencia horrible para mi., es una situación muy dura”, señaló la demandante, quien además indicó que a pesar de todo el tiempo que ha pasado, necesita buscar justicia.
Sin embargo, también se dio a conocer en el informe, que el teniente FAP Jesús Ferreyra Gala, agresor de Diana Bazán fue sentenciado a 12 años de cárcel en el 2018 y actualmente purga condena en el penal de Ica.
Los documentos presentados por ATV, destacan que dicha medida se temó, porque se concluyó que el violador aprovechó el grado de jerarquía que poseía en ese momento, para atacar a la joven cadete dentro de las instalaciones de la FAP.
Pero lo que la víctima manifestó este martes 25 de octubre, es que se encuentra en un proceso contra la FAP, por frustrarle su carrera y proyecto de vida, ya que según confiesa, actualmente podría ocupar un cargo mayor si hubiera continuado con su línea profesional.
Por su lado, el jefe del área de Informaciones de la FAP, respondió que en su momento, se dio de baja a Diana Bazán, porque la Junta de Sanidad determinó que no era apta para la vida militar porque no tenía un buen estado físico ni de salud.
Pero esta noche se dio a conocer, que en enero de 2022, la FAP decidió anular la primera resolución y señalar que el motivo por el que retiraron a la joven cadete en su momento, fue por el grado de depresión agudo que atravesaba, como consecuencia de la violación sexual que recibió de parte de su superior.