Oliver, un niño español con un tumor cerebral, llegó este miércoles a España en un avión medicalizado procedente de Cancún (México) para ser operado por un equipo del hospital Sant Joan de Déu de Barcelona.
El niño, de dos años y medio, y la madre viajaron en un vuelo que cuesta alrededor de 200.000 euros, que ha pagado un empresario español anónimo.
Oliver ya está en el centro hospitalario español para ser sometido a la valoración médica perceptiva, informaron fuentes de la familia del menor.
Los padres del niño, que residen en México, lo llevaron un hospital de ese país el pasado 13 de octubre al notar que le costaba andar, estaba apático, débil y había perdido el apetito.
Las pruebas determinaron que tenía un tumor en la cabeza y también hidrocefalia, es decir, acumulación de una cantidad excesiva de líquido cefalorraquídeo en el cerebro.
Su estado empeoró notablemente en cuestión de días, hasta el punto de que dejó de comer, hablar y caminar, por lo que hace una semana le extrajeron de urgencia el líquido que le presionaba el cerebro y le hacía perder funciones cognitivas.
Sin embargo, el hospital mexicano no se atrevía a extirparle el tumor y le daba entre quince días y un mes de esperanza de vida.
Al conocer su caso, el hospital de Barcelona se puso al habla con la familia y se ofreció a ocuparse del caso.
EFE