El municipio Marcano es la capital de Juan Griego, ciudad reconocida a nivel mundial por sus hermosos atardeceres, bellezas naturales que contrastan con la crítica situación que viven las familias en las zonas más vulnerables.
Por Dexcy Guedez
Simón Calderón, presidente de la Asociación Civil Juventud Insular, junto con el concejal Pablo Mata, emprendieron un trabajo para contrarrestar las estadísticas dadas a conocer en agosto a través de la Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi).
La misma arrojó que el 67% de la población de ese municipio, ubicado al norte de Margarita, vive en pobreza extrema. “Identificamos como problema central el aumento de la desnutrición en niños, niñas y adolescentes en situación de riesgo en el municipio Marcano”, ratificó.
El estudio concluyó que las causas identificadas están vinculadas a la existencia de la emergencia humanitaria compleja, decretada por la legítima Asamblea Nacional de Venezuela en 2017.
Igualmente, están relacionadas con la falta de programas sociales destinados a atender a los más desfavorecidos y también a la improductividad económica de padres y representantes de niños y adolescentes.
Refirió que hoy a la tasa del Banco Central de Venezuela, el salario mínimo es poco más de 14 dólares mensuales, lo que imposibilita que puedan garantizar una dieta adecuada a los infantes.
Otras de las causas de los cuadros de desnutrición, tiene su origen en la falta de educación y consciencia sobre la importancia de la nutrición infantil, así como a la ausencia de financiamiento y voluntad política para atender la problemática.
“Todo este panorama ha generado unas terribles consecuencias, comenzando con la exclusión social y problemas vinculados tanto a la salud física como mental”, alertó.
Resaltó que eso se refleja en datos como el porcentaje de niños con peso inferior a la edad, lo que se ubica en el 6,5% en el municipio Marcano, donde el 4,1% de los pequeños tiene un peso inferior a la estatura y el 25,2% tiene talla inferior a su edad.
Calderón indicó que los expertos y nutriólogos consultados afirman que el Instituto Nacional de Nutrición no dispone de programas de alimentación ni siquiera en los sectores más vulnerables abordados en ese municipio como Culo e’ mono, Adrián, La Sabaneta, Vicuña, Apecurero y Brisas de Los Millanes, entre otros.
“El programa de los Claps y de Alimentación Escolar (PAE) no están cumpliendo con sus intenciones iniciales. El PAE falla, incluso, por falta de agua en los planteles, entre otras razones”, subrayó.
Comentó que le llamó poderosamente la atención que los habitantes de las zonas más afectadas por la problemática, se refieren a los alimentos de los Claps como “bolsa de desnutrición”.
Destacó que la situación se complica en esta zona del país, porque en la isla de Margarita no se produce la mayoría de los alimentos que se consumen.