Uno de pequeño, generalmente, tiene ídolos: un cantante, un futbolista o hasta puede llegar a ser Superman. Stephen Griffiths (52) salió de lo convencional y para él sus referentes eran asesinos seriales. Stephen era un criminólogo y en su casa tenía un museo dedicado a Ted Budny, Jack el destripador y a Jeffrey Dahmer.
Por: Clarín
El hombre tenía un gran fanatismo por ellos y a la gente que lo visitaba les mostraba orgulloso su “museo personal”. Nadie imaginó que iba a convertirse en uno de ellos.
En mayo de 2010, Griffiths fue captado por las cámaras de seguridad del edificio donde vivía golpeando a una mujer hasta dejarla inconsciente para luego dispararle con una ballesta en el cráneo. Cuando la policía lo detuvo, él se autonombró como “El caníbal de la ballesta”. Stephen fue condenado a cadena perpetua por asesinar a 3 mujeres y, según él, fueron muchas más.
Su complicada vida
Stephen Shaun Griffiths nació el 24 de diciembre de 1969 en Yorkshire, Reino Unido. El chico pasó gran parte de su infancia junto a sus hermanos en un orfanato y, según sus vecinos, era un chico muy callado.
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