Más que ir en busca del sueño americano a Estados Unidos, Ángel Fren Fernández, migrante, contó que su meta de entrar a Estados Unidos es para poner un albergue en su barrio venezolano, para que ningún niño pase hambre, esa es la propuesta que le hizo a Dios.
“Somos muchos que tenemos corazón y humildad todavía, queremos echarle ganas y luchar por nuestro país, ayudar a nuestra gente, que el hambre cese”, comentó el migrante.
Dijo, que el mismo gobierno, es quien los tiene sometidos, quien habla mal del gobierno en Venezuela, se convierte en un preso político, no salen hasta que ellos lo decidan y hasta han desaparecido a gente.
Originario de la Isla de Margaritas, Venezuela, tiene el deseo que de hacer su proyecto una realidad para que los niños tengan desayuno, comida, cena, ropa, juguetes en diciembre.
“Yo trato que las navidades sean felices para ellos, creo que diciembre es un mes de comercio, pero yo doy a mis hijos mucho amor y no sólo en Navidad sino todo el año completo”, dijo el venezolano.
Entrando en el tema de la próxima llegada de la Navidad, el venezolano compartió que se le hace un nudo en la garganta al pensar que será la primera navidad que no pasará al lado de sus dos hijos una niña de 8 años de edad y un jovencito de 14 años.
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