En los últimos meses, en el país han salido a la luz pública preocupantes casos sobre pornografía infantil, que han encendido las alarmas de los cuerpos policiales y también de los ciudadanos.
Yanitza Martínez // Corresponsalía La Patilla
La proliferación de videos con este tipo de contenidos se explica, en parte, por la misma crisis económica, pues representa una “tabla de salvación” para inescrupulosas personas que obtienen dinero a partir de la producción de estos materiales audiovisuales.
Sin medir consecuencias, algunos venezolanos, en su mayoría habitantes de sectores populares, se han dado a la tarea de producir contenidos pornográficos y videos de maltrato humano y animal, que luego son comercializados a través de la llamada Dark Web o redes oscuras. Con esta actividad ilegal obtienen jugosos ingresos en criptomonedas.
Fuentes cercanas al área informática del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), señalan que quienes están detrás de estas redes forman parte de una “especie de comunidad” que utilizan códigos especiales para evitar ser descubiertos.
Aseguran los informantes que este contenido ya no es subido a páginas web, sino que usan redes oscuras, las cuales son casi imposibles de detectar o, al menos, para los cuerpos de investigación en Venezuela, que no cuentan con suficientes recursos humanos y tecnológicos para localizarlo.
No existe un monitoreo
Señala una fuente del Cicpc que desde este cuerpo detectivesco no existe un monitoreo como tal de este tipo de casos, por lo que solamente actúan movidos por una denuncia que dé pie a abrir el proceso de investigación.
Por lo general, estas denuncias se concretan luego de la filtración de algún material audiovisual que haya conmocionado a la gente o que se haya viralizado a través de las redes sociales.
En este sentido, comentó que el video grabado en el sector La Sábila de Barquisimeto, en el cual se observa a cuatro mujeres encima de un niño abusándolo y torturándolo, fue un material grabado hace más de dos años y que se filtró tiempo después. Al hacerse viral, los cuerpos de seguridad actuaron en contra de las protagonistas del video, mas no pudieron ir a la raíz de la red, ya que “es casi que imposible de detectar”.
A estas redes oscuras no se puede ingresar a través de motores de búsqueda muy utilizados por los usuarios (por ejemplo, Google), ya que están compuestas por sitios web que ocultan sus direcciones IP.
Lara lleva la delantera
El estado Lara este año 2022 estuvo inmerso en varios escandalosos casos relacionados con abusos contra niños y animales. Es necesario recordar un hecho de maltrato animal que conmocionó al país, en el cual dos hombres pasaron un jeep encima de un perro de manera reiterada.
Este video, al igual que el grabado en La Sábila, fueron producidos hace poco más de dos años, pero se viralizaron este 2022.
Esta práctica, denominada “animal crushing”, consiste en torturar de distintas maneras a animales y, en otros casos, hacer necesidades fisiológicas sobre ellos.
Estas recientes actividades delictivas han sido más frecuentes en el país, debido a la compleja situación económica que atraviesa Venezuela. Así lo deduce el abogado penalista y profesor de Criminalística en la Universidad Central de Venezuela, Luis Izquiel, quien agrega que la “descomposición social y la impunidad” también son factores que inciden en el surgimiento de este tipo de delitos.
Desmantelan bandas en Lara
Desde el año 2020, en la entidad larense han sido desmanteladas tres redes de pornografía infantil. Una de estas fue desarticulada el pasado mes de noviembre en el sector La Sábila, donde funcionarios de la Dirección de Investigación Penal de la Policía Nacional Bolivariana, detuvieron a tres mujeres vinculadas a las personas que protagonizaron el atroz material filtrado y viralizado hace unas semanas atrás donde se abusaba de un niño.
Luego de viralizarse este lamentable video, el fiscal general del régimen chavista, Tarek William Saab, informó que en Lara han sido detenidas 20 personas vinculadas a este tipo de casos.
Las protagonistas del video de La Sábila estarían radicadas en Colombia. Sin embargo, cuerpos de seguridad colombianos lograron detener en Cúcuta a Yenimar Rojas Linares, madre del menor abusado, quien será imputada por los delitos de omisión en abuso sexual, homicidio en tentativa, distribución de material pornográfico y asociación para delinquir.
Sobre este hecho, las autoridades venezolanas tendrían en la mira a Yelitza Elena Lucena, alias “La Chicho”, quien sería la autora intelectual detrás del caso de maltrato de La Sábila, comunidad ubicada al norte de Barquisimeto.
Al parecer, “La Chicho” junto a otra mujer, se encargaba de recibir los videos del “crush fetish”, que consisten en aplastar animales y niños con los pies, y por los cuales pagan entre 10 y 20 dólares.
Posterior al pago por esos videos, viene la comercialización en las profundidades de la internet, cuyos dividendos son mucho más jugosos y atractivos para quienes hoy han convertido a Barquisimeto en una Hollywood de la pornografía y el animal crushing, transformando a la “ciudad de los crepúsculos” en la mayor productora de Venezuela de este tipo de contenido, que sigue creciendo en el perverso mercado de la Deep Web.