En alto riesgo la vida de pacientes oncológicos tras nueva falla de unidad de radioterapia en Guárico

En alto riesgo la vida de pacientes oncológicos tras nueva falla de unidad de radioterapia en Guárico

En alto riesgo la vida de pacientes oncológicos tras nueva falla de unidad de radioterapia en Guárico

 

“Nuestras vidas dependen de esa máquina y no podemos esperar”, relata Yariangel Aponte, una joven de 30 años que pide a las autoridades del Ministerio de Salud la reparación de la máquina de cobalto en la Unidad de Radioterapia Dr. Ramón Millán, en San Juan de los Morros, estado Guárico.

Corresponsalía La Patilla.

Aponte es proveniente del estado Aragua y es una entre los más de 30 pacientes con cáncer que requieren con urgencia la reactivación de la unidad para recibir el tratamiento oportuno y evitar una desmejora en su estado de salud.

“Tenemos que empezar las radioterapias lo más rápido posible. Ya yo tengo un mes y pico esperando, hay muchas personas que dependen de la máquina, porque si no nos hacen las radios, vuelve a surgir la enfermedad y es lo que no queremos”, sostuvo Aponte.

En octubre de 2022, el Instituto de Prensa y Sociedad (Ipys) Venezuela, como parte del proyecto Radio Democracia, publicó el podcast “Cáncer en Venezuela: peregrinar para vivir”, el cual narra las dificultades de pacientes con cáncer en el país. En ese podcast se precisó que la unidad Dr. Ramón Millán es el único centro de radioterapia gratuito en el interior del país.

De acuerdo con el reportaje sonoro de Ipys, en el referido centro de radioterapia en San Juan de los Morros se atienden un promedio de 35 pacientes y más de 200 estaban en lista de espera.

No obstante, la primera semana de diciembre, los pacientes denunciaron la avería de la máquina de cobalto, y pese a que fue reparada antes de finalizar el año, una nueva falla obligó a suspender las terapias hasta que los técnicos acudan a reparar el equipo.

“Soy familiar de un paciente que le tocaba iniciar las radios el 5 de diciembre y se dañó la máquina, luego le pusieron fecha para el 9 de enero y resulta que vinimos y se volvió a dañar”, contó Yasmín Martínez.

Agregó que la mayoría de los pacientes son de otras ciudades del país y deben cubrir gastos de hospedaje, alimentación, más lo correspondiente a medicamentos y otras necesidades que surgen durante el tratamiento.

“Esta es una enfermedad que no puede esperar. Por eso pedimos la colaboración de las autoridades para que vengan y solucionen este problema rápido”, clamó Martínez

 

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