El malestar se siente en el ambiente.
Por laprensalara.com
La infraestructura de los centros de salud públicos en la ciudad de Barquisimeto está deteriorándose con el correr de los años y, frente a la inacción gubernamental, al menos, es el sentir de los propios familiares de pacientes. Rosmery Sánchez, tiene a su hija recluida en el Hospital Dr. Pastor Oropeza de la capital larense, y relató que las condiciones de la sala de hospitalización infantil son realmente deprimentes.
Las paredes de las habitaciones, donde existen unas cuatro camas como máximo, están afectadas por las filtraciones; la pintura está desgastada y el espacio se torna sombrío, sobre todo, por el hecho de que la mayoría de las lámparas no funcionan y en otros cuartos ni siquiera existen.
En un recorrido de La Prensa, se constató el daño en esta área del hospital que recibe a cientos de personas provenientes del oeste de la ciudad, parroquia Guerrera Ana Soto y demás parroquias de Iribarren, incluso, de municipios foráneos. Las familias exhortan a las autoridades a inspeccionar las áreas críticas y proveer del debido mantenimiento.
Douglas León Natera, presidente de la Federación Médica Venezolana (FMV), expresó que existe un 98% de carencias en los principales hospitales del país, incluyendo Lara, y pese a los planteamientos que el gremio médico viene haciendo al Estado desde el año 2001 para que los rehabiliten “hacen caso omiso”.
Indicó que una de las consecuencias de mantener espacios hospitalarios en condiciones deplorables e insalubres es la proliferación de bacterias que complica la condición de los pacientes y también pone en riesgo al personal de salud. “Los hospitales están en terapia intensiva”.
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