Un grupo de enfermeras y jubiladas del Instituto Venezolano de los Seguros Sociales caminaron las avenidas de Punto Fijo, en el estado Falcón, hasta llegar a la Plaza de la Mujer, como acción de protesta ante la violación de los derechos humanos que ejercen sus patronos.
Corresponsalía lapatilla.com
Norka Otero, en representación del Colegio de Enfermeras, dijo que su patrono les viola los derechos humanos a las enfermeras y a todas las empleadas públicas del país.
Por lo tanto, el Día Internacional de la Mujer no es para celebrar, sino para continuar la lucha por un salario digno y condiciones laborales óptimas.
Detalló que la migración masiva de enfermeras ha dejado a los hospitales y ambulatorios prácticamente vacíos, doblando la carga de trabajo para las que quedan en servicio, por un salario que no alcanza ni para pagar el transporte para ir a sus puestos de trabajo.
Destacó que es necesario tener un salario digno, que mejore la calidad de vida de los trabajadores y permita tener estabilidad.
Con ello mejorarán las condiciones de trabajo, y muchos querrán volver a ofrecer sus servicios.
También piden mejoras para los lugares de trabajo, ya que no hay ni los insumos necesarios para atender a los pacientes.
Luz Gámez de Barbera, jubilada que prestó 25 años de servicios en los hospitales de Falcón, expresó que nunca pensó que al estar jubilada debía regresar a las protestas.
“El salario no me alcanza ni para comprar una medicina. Antes con nuestra profesión nos divertíamos, comprábamos casa y carro, salíamos a comer afuera, viajábamos y nuestros hijos estudiaban. Actualmente alguien que trabaje, no puede tener ni una sola cosa de las que teníamos antes con ese salario”.
El llamado fue a seguir en las calles, a denunciar hasta que se haga justicia y reconozcan que los sueldos que no alcanzan ni para comer.