Cada vez que llueve en el sector de Colinas de Pinto Salinas en San Félix, el terror se apodera de los habitantes que viven cerca de la cárcava que está formada en el lugar. Desde hace años han denunciado que el terreno ha ido cediendo y la situación se agudiza con la temporada de lluvias.
Por Pableysa Ostos/Corresponsalía lapatilla.com
Este 24 de abril, ese temor se volvió a sentir. Pasadas las 4:00 de la tarde empezó a llover en varios sectores de Ciudad Guayana, al sur del país. Uno de esos sectores fue Colinas de Pinto Salinas.
Ormelys Salazar, residente de la comunidad, relató que “empezó la lluvia, la lluvia, se me empezó a caer la casa. Eso fue horrible. Empecé a llorar con mis hijas, un sufrimiento tremendo. La nevera se me cayó por el zanjón. Se me iba derrumbando la casa”.
“El techo se me estaba cayendo encima. Yo no hallaba qué hacer. Eso fue horrible, horrible. Te imaginas, mi casa, ahora me quedé sin nada. Todo, todo lo perdí. Fue horrible”, lamentó Salazar. Ella vive en la propiedad junto a su hermano y sus tres hijas de 4, 5 y 12 años de edad.
Por su parte, Jorge Luis Salazar Marcano, hermano de Ormelys, contó al equipo de lapatilla.com que estuvo lloviendo por más de una hora. “El derrumbe transcurrió en unos 10 minutos. Muchos de los vecinos se preocuparon, porque dentro de la vivienda había unos animalitos, y ahí fue que me acerqué y saqué, y en el proceso de ir y sacar, empezó a caer”.
“Señor gobernador, lo estoy esperando. Porque realmente esto ya tiene tiempo sucediendo y viene mucha gente, viene y no nos dan respuestas. Queremos que nos resuelvan, porque básicamente quedamos sin casa y que le metan la mano a eso. Esto no tiene dos días, esto tiene años. Vienen, nos marean, nos dejan esperando y nada. En esa cárcava hay mucha tubería perdida, que esa es inversión perdida que yo no me explico cómo un gobierno va hacer perder un material para no terminar un proyecto”, detalló Jorge Luis.
Miedo a quedar sin nada
Por su parte, Ester Núñez, otra vecina del sector, denunció que su vivienda también está en riesgo. “Porque tenemos las bocas de visita en la parte de atrás. Ya había ido a Inviobras a solicitar ayuda y nunca nos han dado respuesta. Queremos que algún ente gubernamental se apiade de nuestra comunidad, porque no queremos quedar sin casas. Yo tengo dos niños pequeños y no tengo a dónde ir, y estamos en alto riesgo”.
“Estamos con mucho miedo, demasiado miedo y queremos ver si el gobernador, el alcalde, se apiadan de nosotros acá. Están en estado de emergencia cinco familias, pero en total son 70 familias que están en riesgo de perderlo todo”.
En alerta
El representante de la Asociación Civil Gente Para Servir Caroní (GPS Caroní), Simón Yegres, destacó que las cárcavas tienen años, en diferentes dimensiones y en distintas partes de la ciudad.
“Están ubicadas, están cuantificadas. Hace tiempo superamos las 70, basado en el informe presentado por Protección Civil (PC). Los organismos oficiales en 2015 afirmaban que habían 64, de las cuales cinco estaban activas. Desde ese momento hasta acá, nuestra ONG ha estado monitoreando el asunto, lo cual nos hace ver el altísimo riesgo, nos muestra la vulnerabilidad y que no somos lo que estuvimos creyendo durante mucho tiempo de que somos el Macizo Guayanés”, comentó Yegres.
Agregó que las cárcavas tragan, hay derrumbes, deterioran la vía, ponen en peligro la estabilidad de viviendas y la vida de las personas, y la cantidad de cárcavas que existen frena el crecimiento de la ciudad. “Tecnológicamente las soluciones no son las mismas para todas. Cada una tiene su peculiaridad y depende del tipo de suelo, el entorno que tiene, donde está ubicada, entre otros factores”.
Lluvias en Caroní
Roy Quiaragua, secretario de Política y Seguridad Ciudadana del municipio Caroní, señaló que “estamos activados desde hace más de 72 horas. Tenemos que en el sector de Pinto Salinas, lamentablemente tenemos el acontecimiento de que dos casas se vinieron abajo, tenemos esa situación de derrumbe de casa. En el sector de Chirica Vieja, tenemos anegado una gran parte del sector en lo que se refiere a las adyacencias del colegio Antonio José de Sucre y parte de nuestro sector de Pozo Verde”, detalló el funcionario.
Sumó que tienen alrededor de 62 sectores en alto riesgo y ya están trabajando en base a eso. “Por supuesto que es difícil que cuando ocurran este tipo de fenómenos climatológicos, hay veces que es difícil decir qué sector puede ser más anegado. Aunque se hayan realizado los trabajos, las ondas tropicales pueden ser más fuertes. Pero seguimos haciendo lo que dice la metodología. Esperamos que podamos sufrir lo menos posible en esta temporada de lluvia”.
Posible soluciones
Yegres planteó que entre las soluciones hay tener claro que ya la situación no puede esperar más y que las dimensiones de las cárcavas son muy grandes, y que el costo para resolver es muy alto. Por eso propone, en primera instancia, crear una oficina que se encargue solo de atender las cárcavas de la ciudad, con equipo y recursos.
También se debe desarrollar un plan presupuestario, el cual abarque un perfil geológico de la ciudad hasta la ejecución de la intervención para esas cárcavas. “Son muchos años ya, esto ha ido creciendo, amerita planes urgentes y certeros. Diseñar un plan, hacer un presupuesto coordinado, porque quizás se requiera buscar recursos fuera del país. Haciéndose el loco, no se va a resolver. Por el contrario, se va agravar más si no se hace con la seriedad que corresponde”, agregó Yegres.
En 2013, la gobernación del estado encabezada en ese momento por Francisco Rangel Gómez, afirmaba la existencia de 62 cárcavas. Bajo la gestión de Gómez y José Ramón López (alcalde de Caroní para ese entonces), solo hubo la intervención de la cárcava Churún Merú, en Alta Vista, a la altura del Hospital Uyapar.
Gobiernos han ido pasando, presupuestos han sido aprobados y la situación sigue siendo un riesgo altísimo para las más de 300 familias que viven cerca de estos grandes cañones que se han venido formando en Ciudad Guayana con el pasar de los años.