Todo estaba ensayado al milímetro en la coronación de Carlos III en la Abadía de Westminster, el pasado sábado 6 de mayo. Sin embargo, durante la retransmisión en directo de la ceremonia hubo algún detalle que no pasaron inadvertidos para los espectadores.
Por larazon.es
Dos fueron los momentos más comentados: uno, el despiste de Katy Perry buscando su asiento en la Abadía y otro con un personaje con gafas y bigote que muchos pensaron que podía ser la duquesa de Sussex, disfrazada.
Finalmente se supo que era el compositor galés sir Karl Jenkins, que se encontraba sentado junto a Andrew Lloyd Webber. Siguiendo la broma, él mismo reconoció no ser Meghan Markle a través de un vídeo de TikTok.
Pero lo que sí causo sorpresa fue la figura de la “parca” que apareció al fondo de la pantalla durante la retransmisión de la coronación, causando un gran revuelo en las redes sociales.
Una figura encapuchada y vestida de negro se escabullía por la puerta principal de la abadía, sosteniendo lo que parecía ser un largo bastón, que algunas personas describieron como una guadaña.
Surgieron todo tipo de teorías: era Meghan Markle, de nuevo; el espíritu de la princesa Diana que llegaba para buscar venganza, pero la identidad ya ha sido revelada y no era ninguna de las anteriores.
Ha sido la propia abadía de Westminster la que ha revelado que se trataba de un sacristán haciendo su trabajo diario.