El economista Asdrúbal Oliveros precisó que Venezuela tiene «una economía en extremo frágil», dado que ha perdido 80% de su tamaño entre 2014 y 2020.
No obstante, indicó que actualmente «estamos a merced de cambios, incluso pequeños que pueden hacer que la economía tenga algunos signos positivos y otros negativos».
«Hoy Venezuela es un país pobre, un país con un Producto Interno Bruto (PIB) de US$60.000 millones, que está entre los más pobres de América Latina, cuando en el año 2012 su PIB superaba los US$350.000 millones», recordó.
Dijo que el cambio «es brutal» y esto se siente principalmente en el consumo. «Hoy en Venezuela tenemos un nuevo consumidor, cuyos ingresos son en extremo limitados, por lo tanto, las empresas enfocadas en consumo masivo tienen que entender esta realidad», sumó.
Nichos de mercado
Oliveros manifestó que muchas empresas en estos últimos meses, se han centrado en nichos de mercado, cuya población no supera el 10% y por lo tanto, «en tamaño, en oferta hay limitaciones y saturación».
«En done hay verdaderas oportunidades es en las grandes mayorías, entendiendo qué hacen, cómo operan y cómo consumen», recalcó.
Por lo tanto, consideró que «es un error» asumir que el consumidor promedio, que tiene fuertes limitaciones de ingresos, no consume: «sí consume, pero lo hace de forma diferente y esa es la clave que tienen que entender las empresas».
«Entender, investigar y profundizar quién es tu cliente, qué consume, cómo consume, en qué frecuencia lo hace y por qué lo hace. En la medida que puedan comprender eso, podrán diseñar mejor sus estrategias de ventas, de precios, sus ofertas más atractivas para ese consumidor», añadió.
Puntualizó que muchas empresas «no tienen esto claro y a veces se han basado en la percepción de sus gerentes, de sus dueños y no necesariamente de la realidad».
Claves
El economista venezolano indicó en sus redes sociales que la clave también es entender la segmentación: «puedo tener un producto para un tipo de cliente y un producto para otro, pero entendiendo bien cómo conviven estos tipos de clientes y cómo se interrelacionan dentro de la empresa y del negocio».
«El consumidor venezolanos está ávido de descubrir, está en la búsqueda permanente de la relación precio-calidad, ya no necesariamente es fiel a las marcas, más bien está abierto a descubrir nuevas marcas», precisó.
Igualmente, enfatizó en que es necesario recordar «no ver a un cliente como el pobre que no puede comprar», sino «verlo más bien como alguien con limitaciones de ingresos que toma decisiones más pensadas a la hora de consumir, pero no deja de hacerlo».