Un alto funcionario de la administración Biden afirma que los satélites espía estadounidenses detectaron una explosión en la presa de Kajovka justo antes de que se derrumbara, pero los analistas estadounidenses aún no saben quién causó la destrucción de la presa ni cómo ocurrió exactamente.
Por Eric Schmitt | The New York Times
El funcionario dijo que los satélites equipados con sensores infrarrojos detectaron una firma de calor consistente con una gran explosión justo antes de que la presa se derrumbara, desatando enormes inundaciones río abajo.
Los analistas de inteligencia estadounidenses sospechan que Rusia estuvo detrás de la destrucción de la presa, dijo el alto funcionario de la administración, hablando bajo condición de anonimato para discutir los detalles operativos. Pero añadió que las agencias de espionaje estadounidenses aún no disponen de pruebas sólidas sobre quién fue el responsable.
Los datos sísmicos recogidos por el observatorio NORSAR de Noruega también apoyaron la teoría de que se había producido una gran explosión cerca de la presa de Kakhovka el martes a las 2:54 a.m. hora local, cuando la estructura se derrumbó. NORSAR afirmó en un comunicado que las señales captadas desde una estación situada a 385 millas de la presa muestran claros indicios de una explosión.
Expertos en ingeniería y municiones han dicho que lo más probable es que una explosión deliberada en el interior de la presa de Kajovka, controlada por Rusia, causara su colapso el martes. Añadieron que un fallo estructural o un ataque desde el exterior de la presa eran explicaciones posibles pero menos plausibles.
El funcionario de la administración no descartó la posibilidad de que daños previos en la presa o el aumento de la presión del agua pudieran haber contribuido al colapso, pero los funcionarios estadounidenses creen que la explosión, deliberada o accidental, fue el desencadenante probable.
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