El Tribunal Supremo de España confirmó este jueves el procesamiento del expresidente del Gobierno catalán y eurodiputado Carles Puigdemont por malversación y desobediencia, tras rechazar el recurso de varios líderes independentistas con causas pendientes ante la Justicia española.
Puigdemont, que presidía el Gobierno de Cataluña cuando en 2017 fue proclamada unilateralmente la independencia de España, había apelado junto a otros tres exmiembros del entonces Ejecutivo regional la decisión del alto tribunal de mantenerlos procesados por esos delitos tras haber desaparecido en España el de sedición por el que también fueron acusados.
El Supremo rechazó también un recurso del partido de extrema derecha Vox, que ejerce la acusación popular, que pedía añadir en la acusación el delito de desórdenes públicos agravados en sustitución de la sedición.
“Los encausados desplegaron e impulsaron una desobediencia civil y una insurrección institucional orientada a alterar el orden constitucional, sin ninguna llamada a la violencia, no unos desórdenes públicos por medio de la violencia”, mantiene el tribunal en su resolución de mantener el procesamiento.
La defensa del expresidente había pedido anular también las órdenes de detención que pesan sobre los acusados en España, al argumentar que el auto de procesamiento había quedado “desfasado” con el paso del tiempo y después de la reforma penal en España que derogó la sedición y modificó el delito de malversación.
La Fiscalía, en cambio, respondió que lo único que pretendían es “liar más procesalmente el asunto para seguir planteando nuevas batallas” en los tribunales.
Puigdemont, que reside en Bélgica, está pendiente de que la Justicia europea se pronuncie definitivamente sobre si tiene o no inmunidad como eurodiputado y en caso de pronunciarse a su favor podría dejar sin efecto la orden de detención en España.
EFE